Más seguridad en aeropuertos, derrocamientos de regímenes y guerra contra el terrorismo, algunos de los efectos del 11 de septiembre en el mundo.
El 11 de septiembre del 2001 es recordado por el mundo como el día que el gigante Goliat recibió una pedrada en medio de la frente que lo estremeció hasta la médula.Analistas de la realidad mundial explican que con el derrumbe de las Torres Gemelas, que componían el World Trade Center, en el corazón de Nueva York (Estados Unidos), también se vino abajo la idea de que la seguridad estaba garantizada para todos y que ese fue el verdadero éxito del golpe asestado por parte del grupo terrorista Al Qaeda a la principal potencia mundial. El internacionalista Enrique Serrano dice que ese fue el día en el que el mundo cambió para siempre porque ocurrió lo inesperado: Derribaron al gigante y en su propio suelo. Algo que antes nunca había ocurrido y que cuando pasa acarrea una serie de consecuencias que hoy, diez años después, siguen teniendo efectos.A partir de entonces aquel atentado que dejó la escalofriante cifra de 3.000 muertos, la dinámica mundial se alteró y no ha sido la misma. Y no solamente en el tema de seguridad, sino también en la economía, en las relaciones internacionales, en los derechos civiles y hasta en la manera de invertir presupuestos de los países. El docente universitario español, Ángel Rivero, dice que lo que ocurrió el 11 de septiembre es similar al trauma que sufre una persona cuando padece un accidente de tránsito: queda presa de un miedo paralizante porque se sabe vulnerable y teme que en cualquier momento le pueda volver a ocurrir. Fenómeno que los siquiatras denominan estrés postraumáticoLos atentados dejaron una huella psicológica mundial que se ha expandido a innumerables áreas y es probable que se necesiten décadas para cerrar heridas y volver a las dinámicas anteriores.A continuación presentamos los diez efectos que dejó el peor ataque terrorista en la historia de Estados Unidos y el mundo entero.La idea de seguridadEl presupuesto destinado para la seguridad en Estados Unidos desde el año 2002 y hasta el 2006 subió en US$50.000 millones en comparación con toda la década del 1990. Desde entonces se instauró lo que en el mundo se ha denominado como la guerra frontal contra el terrorismo. Desde el ataque a las Torres Gemelas, el Gobierno de George W. Bush, presidente entre el 2002 y 2008, inició programas de seguridad preventiva y realizó invasiones a Afganistán (en donde derrocó al régimen talibán) e Iraq donde acabó con el régimen de Sadamm Hussein.La ley antiterroristaColombia fue uno de los países que entró en la lucha contra el terrorismo. Después de que Estados Unidos hiciera un llamado a varios países del mundo para que lucharan en conjunto en contra de grupos como Al Qaeda, el entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aumentó las ayudas a Colombia. El ex presidente de este país, Álvaro Uribe Vélez logró entonces que se aprobaran tratados en América y Europa, en los que se calificaban a los grupos guerrilleros de las Farc y el ELN como células terroristas potencialmente nocivas.Nuevos enemigosPara el internacionalista Enrique Serrano, una de las consecuencias del 11 de septiembre es que la concepción del enemigo que se debe combatir cambió y se privatizó.Antes de los ataques se combatían estados, sectores públicos, pueblos. Pero, luego el enemigo se privatizó y ya no eran países que estaban claramente ubicados en la geografía mundial, sino que eran grupos religiosos o extremista. Entonces ya no se perseguía al eje del mal (Irán, Iraq, Afganistán) sino a miembros de Al Qaeda, del IRA en Irlanda, de ETA en España y los talibanes en Afganistán.Temor nuclearDesde la Guerra Fría no existió sobre el mundo una amenaza de holocausto nuclear como después del 11 de septiembre. Informes de la CIA, revelados tiempo después de los ataques hablaban del peligro de países como Irán e Iraq en el desarrollo de bombas con uranio. La invasión a Iraq en 2003 estuvo justificada en esa misma base.El pasado mes de mayo, la CIA nuevamente lanzó una alerta global debido a que su inteligencia descubrió que Al Qaeda había lanzado una amenaza de ataque nuclear si su líder, el hoy fallecido Osama Bin Laden, era capturado o dado de baja. El analista Ancízar Marroquín explica que esa alarma determinó todos los protocolos de manejo de multitudes que existen hoy en el mundo.Métodos de guerraLas Fuerzas Armadas estadounidenses experimentaron una mutación radical después de que se iniciaron acciones para dar con los culpables del ataque en Nueva York. Los ataques frontales y apabullantes cambiaron bajo la presión de guerrillas para la cual no estaban preparadas y debieron volver a aprender a combatir una insurrección con la ayuda de unos servicios de inteligencia cada vez más militarizados y una nueva arma: los drones, aviones no tripulados. El número de naves y submarinos se redujo 10% y el de escuadrones de aviones cazas y bombarderos a la mitad.El miedo colectivoLa psicóloga Margarita García dice que después del derrumbe del World Trade Center se generó un pánico generalizado que hoy continúa vigente, porque si algo así pasó, puede volver a pasar. La psicóloga dice que eso también provocó que los protocolos de manejo de multitudes se reescribieran y que los impactos psicológicos de estar en estado de peligro constante. Dice que por eso en los aeropuertos se extremaron medidas de seguridad como los escáner corporales.Restricción a los derechos civilesDe acuerdo con Ángel Rivero, profesor universitario español, tras los ataques la principal consecuencia fue el aumento en los controles a los derechos civiles, especialmente de los musulmanes. Según cifras oficiales, después del atentado se registraron las huellas de 80.000 árabes y musulmanes bajo la Alien Registration Act 1940. 8.000 de ellos fueron entrevistados y 5.000 extranjeros fueron detenidos bajo la resolución conjunta del Congreso de los Estados Unidos 107-40, que autorizó el uso de fuerza militar para detener y prevenir terrorismo internacional en los Estados Unidos.Este país asumió su papel de policía del mundo y se permitió indagar en las vidas de las personas que podrían, por sus creencias religiosas o país de origen, significar una potencial amenaza para la seguridad del país.Asimismo, en Manhattan se ubicaron cámaras de seguridad para monitorear permanentemente la ciudad con el fin de evitar nuevas acciones terroristas.Ahora la privacidad es una utopía. Se vive en una vigilancia similar a la del Gran Hermano, concluye el analista.Afán por crear más democracias mundialesPara Ancízar Marroquín, en cierta medida los eventos que condujeron a revoluciones en Egipto, Libia y Siria fueron impulsados por los hechos ocurridos en el 11 de septiembre del 2001.El analista político, especialista en conflictos internacionales, explica que después de que se iniciara una campaña mundial para encontrar a Osama Bin Laden, que incluyó a gobiernos del Reino Unido, Estados Unidos, Canadá, Francia y organismos mundiales como la ONU, se impulsaron procesos de derrocamiento de regímenes autoritarios.Hay que tener en cuenta que en un momento hubo un impulso por el control del petróleo que hay en Iraq y que parte de la invasión de los países aliados tuvo que ver con eso, pero, en cierta forma esos impulsos para entregar el poder al pueblo generaron una especie de efecto dominó que provocó que nuevos liderazgos nacieran en estos pueblos que hoy se levantaron.El politólogo lamenta que esos procesos de eliminación de dictaduras no llegaran a Latinoamérica, en donde existen gobiernos como el de Hugo Chávez, en Venezuela y Raúl Castro, en Cuba.Economía se hizo vulnerable Aunque afirmar que la crisis económica mundial fue propiciada por los ataques del septiembre 11 sería una exageración, el docente universitario experto en economía, Jordi Cuers, explica que sí se trató de un catalizador. La situación económica mundial estaba convulsionada pero el terrorismo desató olas de miedo, especialmente en las bolsas. Eso generó grietas que finalmente derivaron en la hecatombe económica del 2008. El docente universitario agrega que lo que ocurre es que al romperse esa sensación de invulnerabilidad al ser atacados en su propio suelo, queda la sensación de que se es frágil y que en cualquier oportunidad algo similar puede volverse a presentar.La arquitectura cambiaEn rascacielos de EE.UU. cambiaron muchas cosas desde el ataque terrorista. El edificio más alto de los Estados Unidos tiene ahora barreras de cemento, detectores de metales y una sofisticada red de cámaras que permiten observar todo lo que sucede dentro y fuera de la torre. También se han hecho adaptar los ascensores para que puedan ser usados en evacuaciones, pero en términos generales Estados Unidos está por detrás de otros países desarrollados en este terreno.La Comisión de Códigos Internacionales recomendó 40 cambios en los códigos de construcción tras los ataques del 11/9, incluidas escaleras más anchas.Cronología del atentado8:00 a.m. Miles de personas iban a trabajar normalmente, mientras cuatro vuelos comerciales, tres en Boston y uno en Washington, despegaban hacia Los Ángeles. 8:46 a.m. El vuelo 11 de American Airlines, que había despegado a las 8:00 a.m. con 92 pasajeros desde el Aeropuerto Internacional Logan de Boston hacia Los Ángeles, impacta la Torre Norte de las Torres Gemelas, a 708 kms./h. 9:02 a.m. El Boeing 767 del vuelo 175 de United Airlines, con 65 personas a bordo, es estrellado contra la Torre Sur, a 870 kms/h. El suceso es visto en directo por la televisión, que mostraba la densa humareda que surgía de la Torre Norte. Andrew Card, jefe de empleados de la Casa Blan ca, interrumpe al presidente George W. Bush, para avisarle que embistieron la otra torre y que EE. UU. está en ataque. Bush leía cuentos a niños de una escuela primaria de Sarasota, Florida.9:19 a.m. Dos inmensas columnas de humo se alzan sobre el World Trade Center, invaden el cielo del corazón de Manhattan. A las 9:31 a.m. el presidente George W. Bush pronuncia un discurso desde la escuela primaria de Sarasota, informando que al parecer se trata de un acto terrorista. 9:37 a.m. El vuelo 77 de American Airlines, un Boeing 757 con 64 pasaje- ros, que había salido a las 8:21 a.m. del Aeropuerto Internacional Dulles de Washington DC hacia Los Ángeles, se estrella contra la sede del Pentágono en la capital de EE. UU. El gobierno difunde un video del momento del impacto. La FAA ordena a todos los aviones en vuelo aterrizar de inmediato en el aeropuerto más cercano y envía misiles para atacar 9:49 a.m. Ante la imposibilidad de usar los ascensores y las escaleras de emergencia y de rescatar a las víctimas por vía aérea en la terraza, muchas comienzan a lanzarse desde la altura.9:59 a.m. Se derrumba la Torre Sur. El vuelo 93 de United Airlines, el Boeing 757 con 44 pasajeros, que había salido a las 8:41 a.m. de Newark a San Francisco, cae a campo abierto en Shanksville, Pensilvania, por aparente forcejeo de tripulantes y pasajeros con los secuestradores por retomar el control. Se cree que el ataque iba al Congreso o la Casa Blanca. 10:28 a.m. Cae la Torre Norte. Cientos de miembros de cuerpos de bomberos, policías, socorristas y otros organismos de apoyo resultan impotentes ante la magnitud de la tragedia y muchos mueren al caer las edificaciones. 5:25 p.m. Se derrumba el edificio 7 de 47 pisos del World Trade Center. A las 7:00 p.m. el Presidente Bush regresa a la Casa Blanca después ir a las bases militares de Barksdale en Louisiana y de Ouffutt en Nebraska. Manhattan queda bajo una nube de polvo y humo que duró días en disolverse.