El domingo 23 de julio de 2023 se llevarán a cabo elecciones generales en España, las cuales estaban previstas inicialmente para diciembre.
Los principales candidatos para estas legislativas son el socialista Pedro Sánchez, actual presidente del Gobierno de España, el conservador Alberto Núñez Feijóo, la comunista Yolanda Díaz y el ultraderechista Santiago Abascal.
Uno de los grandes favoritos
Alberto Núñez Feijóo está al frente del Partido Popular desde hace un año y ha sido uno de los artífices de la ‘resurrección’ de la derecha española después de una gran crisis interna. Este líder político fue presidente de su región, Galicia, durante trece años y a sus 61 años se lanzó como candidato a la presidencia del país.
Fejióo es el favorito de las encuestas y su propuesta de programa de gobierno se resume en “derogar el sanchismo”, en referencia al gobierno de Pedro Sánchez, ya que la derecha española lo acusa de cruzar líneas rojas.
Un ejemplo de ello es el indulto a los líderes independentistas catalanes que fueron condenados luego de intentar la secesión en 2017, además de algunos acuerdos alcanzados para aprobar leyes con Bildu, un partido independentista vasco que ha sido visto como heredero político de la organización armada ETA, una organización terrorista.
En una entrevista para la revista SEMANA afirmó “tenemos un proyecto que buscará recuperar la concordia en nuestro país con una política que una y no enfrente, y que deje atrás la crisis institucional y la mala situación económica que nos lega este gobierno. Derogaremos leyes que han sido nefastas, llevaremos a cabo una rebaja fiscal a las rentas medias y bajas, y los independentistas y populistas dejarán de ser claves en la gobernabilidad de España”.
El candidato está de acuerdo con la sostenibilidad y la transición energética, por ello lo ha planteado en su plan de gobierno, por otra parte, está en total desacuerdo con la legalización de las drogas.
Además, confía en que América Latina, vuelva a tener dirigentes que no sean autoritarios ni populistas. En la entrevista con SEMANA mencionó que estos líderes no deben tener “posiciones radicales que no aportan nada bueno para el bienestar de sus ciudadanos y el desarrollo de sus pueblos. Tenemos infinidad de vínculos con América Latina y sería bueno para todos que prevalezcan aquellos que respetan la democracia, las libertades públicas, los derechos humanos y que trabajan día a día por una sociedad mejor”.
También comentó que el populismo y la demagogia no han traído nada bueno a América Latina ni a Europa y por esta razón deben eliminarse para que los pueblos surgan.
El gobierno saliente
Pedro Sánchez, un economista de 51 años, es presidente del Gobierno de España desde mediados de 2018, esto luego de que despojó del poder al conservador Mariano Rajoy a través de una moción de censura en el Congreso, apoyado por partidos de izquierda e independentistas catalanes y vascos.
Durante su gobierno se alió con el partido de izquierda radical Podemos, a principios de 2020, y logró aprobar varias leyes que incluyen la legalización de la eutanasia, la rehabilitación de la memoria de las víctimas de la dictadura de Francisco Franco (1939-1975) y permitir el cambio de género libremente desde los 16 años. Además, Sánchez durante su gestión aumentó la influencia de España en los asuntos de la Unión Europea.
Su primer gobierno terminó en 2019 y en enero de 2020 fue investido nuevamente como presidente del Gobierno en enero de 2020, luego de un acuerdo para formar gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos.
Durante su gestión ha sido abierto con los inmigrantes, se han adelantado políticas de género y de apoyo a la comunidad LGBTIQ+.