Luego de toda la indignación que causó el caso de un perro bull terrier, amarrado en una zanja, con el agua hasta el pecho en la autopista interestatal 75, en la zona de Tampa, en medio del caos del Huracán Milton, las autoridades pudieron ubicar a su dueño y arrestarlo.

Esto se da luego que las autoridades lograran comprobar que abandonó a su perro en una inundación cerca de una autopista, mientras se realizaban evacuaciones de la costa occidental de Florida.

Tras su rescate por parte de los agentes de la Patrulla de Caminos de Florida, el canino fue llevado a la veterinaria para que lograran determinar su estado de salud.

Trooper, así fue bautizado el canino. Imagen difundida por el Departamento de Seguridad Vial y de Vehículos de Motor de Florida. | Foto: El País

Fue allí donde los agentes decidieron bautizar al perro como Trooper.

fue encontrado el miércoles pasado mientras los residentes evacuaban la región antes de la llegada del huracán de categoría 3.

“Tomamos este delito muy en serio y este acusado enfrentará las consecuencias de sus actos”, señaló Suzy López, fiscal del estado cuya jurisdicción incluye la zona de Tampa.

El agente que localizó al perro basándose en la descripción de un testigo que conducía por el lugar, declaró que el perro se encontraba sumamente angustiado y tembloroso.

“Había mucho tráfico porque muchas personas estaban evacuando. Debido a las circunstancias, y al grave peligro y riesgo de muerte que el acusado le provocó al perro, las acciones del acusado causaron un dolor y sufrimiento innecesario al perro”, señala el reporte policial.

Y es que luego de que el dueño del animal se presentara en un refugio para animales de la zona de Tampa, buscando el perro, los investigadores pudieron localizarlo.

Bengi es otro perro que sobrevivió al Huracán Milton. Sus dueños murieron cuando la casa en la que vivían se vino abajo, pero el animal buscó refugio en una casa vecina y pudo permanecer a buen recaudo. | Foto: El País

Trooper ya había sido trasladado a un albergue de Tallahassee y además fue asignado a una familia temporal.

Ante esto, el dueño, de 23 años de edad, dio su aprobación para que el animal que se quedara con su nueva familia con la condición de que “estuviera bien cuidado y fuera querido”.

Durante una entrevista con el agente, el propietario renunció a su derecho a permanecer en silencio y rindió una declaración que apareció censurada en el reporte.