Menciones a Isabel II
“Su dedicación y devoción como soberana nunca vacilaron a través de momentos de cambio y de progreso, a través de momentos de alegría y celebración, y a través de momentos de tristeza y pérdida”, dijo Carlos III en un mensaje televisado desde el Palacio de Buckingham y con una foto de Isabel II a su izquierda.
Después de homenajear la memoria de su madre, honró su vida de servicio público y reconoció, además, la tristeza como hijo por la pérdida de su madre:
“Les hablo hoy con sentimientos de profunda tristeza. A lo largo de su vida, su Majestad la reina, mi amada madre, fue una inspiración y un ejemplo para mí y mi familia. La deuda que tenemos con nuestra madre es la mayor que una familia podría llegar a tener, por su amor, cariño, guía y ejemplo”.
“Su muerte genera mucha tristeza a muchos de ustedes y comparto con ustedes ese sentimiento de pérdida sin medida”.
La Mancomunidad de Naciones
“Cuando la reina llegó al trono, Reino Unido y el mundo aún estaban enfrentando las privaciones y los efectos de la Segunda Guerra Mundial (…) En el curso de los últimos 70 años hemos visto a nuestra sociedad convertirse en otra con muchas culturas y creencias. Las instituciones del Estado también han cambiado. Pero a través de los cambios y los desafíos, nuestra nación y la gran familia de territorios reales, de cuyos talentos, tradiciones y logros estoy profundamente orgulloso, han prosperado”.
Sobre el rol de un reinado como el de él, aseguró: “El papel y los deberes de la monarquía también permanecen, así como la relación particular y la responsabilidad con la Iglesia de Inglaterra, en la que tan enraizada está mi fe”, señaló Carlos III.
Rememoró de nuevo a su madre: “Como hizo la reina con una devoción inquebrantable, yo también prometo, durante el tiempo que Dios me dé, ser fiel a los principios constitucionales que están en el corazón de nuestra nación”.
“Mi vida por supuesto cambiará al asumir mis nuevas responsabilidades. No será ya posible para mí dedicar tanto tiempo y energía a las acciones de caridad y a los asuntos que tanto me importan, pero sé que este importante trabajo continuará en manos de otros”, dijo sobre cómo cambiará su vida.
Agregó:
“Como hizo la propia reina con esa devoción inquebrantable, yo también me comprometo solemnemente, en el tiempo restante que Dios me conceda, a mantener los principios constitucionales que están en el centro de nuestra nación”.
“Y vivan donde vivan en el Reino Unido, en los reinos y territorios alrededor del mundo, y sean cuales sean sus creencias u orígenes, procuraré servirles con lealtad, respeto y amor, como he hecho a lo largo de mi vida”.
“Camila, mi reina consorte”
Hubo palabras también para su esposa desde hace 17 años, Camila:
“Cuento con la ayuda de mi querida esposa Camila. En reconocimiento a su leal servicio público desde nuestro matrimonio desde hace 17 años, se convierte en mi reina consorte”.
“Sé que estará a la altura de las demandas de su nuevo puesto con su continua devoción, en la que tanto he confiado”.
Habló sobre los príncipes William y Harry: “Como mi heredero, William asume los títulos que tanto han significado para mí”, dijo Carlos III, que nombró a William príncipe de Gales. “Con Catherine a su lado, sé que nuestros nuevos príncipe y princesa de Gales continuarán inspirando y liderando nuestras conversaciones como país”, continuó.
“Quiero expresar mi amor por el príncipe Harry y por Meghan mientras continúan su vida en el extranjero”, dijo sobre la pareja, radicada en Estados Unidos y alejada de los deberes reales.
“A mi amada mamá”
“En poco más de una semana nos reuniremos como nación, como Mancomunidad de Naciones y comunidad global, para dar sepultura a mi amada madre. En nuestro dolor, recordemos y saquemos fuerza de la luz de su ejemplo. De parte de toda mi familia, solo puedo ofrecer mi más profundo y sincero agradecimiento por sus condolencias y apoyo. Significan mucho más para mí de lo que jamás podría expresar”, dijo.
“Y a mi amada mamá, en el momento en que empiezas tu último gran viaje para acompañar a mi querido papá fallecido, simplemente quiero decir: gracias. Gracias por tu amor y tu devoción con nuestra familia y la familia de las naciones que serviste de forma tan diligente todos estos años.
Que los ángeles y sus cantos te acompañen a tu eterno descanso”.