El presidente estadounidense, Joe Biden, instó este domingo a “bajar la temperatura” de la política tras el intento de asesinato contra el republicano Donald Trump en plena campaña electoral.

En un rotundo mensaje a la nación, el presidente demócrata, de 81 años, y candidato a la reelección en los comicios del 5 de noviembre frente a Trump, dijo este domingo que la política no debería ser “un campo de la muerte”.

Las elecciones, dijo, serán un “período de prueba” tras el intento de acabar con la vida del magnate republicano en un acto electoral en Butler, Pensilvania, el sábado por la noche, en el que resultó herido en una oreja.

Tanto Biden como Trump habían llamado a lo largo del domingo a la “unidad” en una nación políticamente polarizada.

“La unidad es el objetivo más difícil de alcanzar de todos, pero nada es más importante que eso en este momento”, dijo Biden en breves declaraciones desde la Casa Blanca, flanqueado por la vicepresidenta Kamala Harris y su jefe de seguridad nacional.

El demócrata llamó por teléfono a su rival, al que durante la campaña ha acusado de ser una amenaza para la democracia, para interesarse por su estado.

El equipo de campaña del demócrata pausó temporalmente los anuncios de televisión.

Viaje a la Convención Republicana

Trump, de 78 años, también publicó en su plataforma Truth Social un mensaje similar: “En este momento, es más importante que nunca que permanezcamos unidos (...) fuertes y determinados e impidiendo que la maldad gane”.

“Solo dios impidió que ocurriera lo impensable”, dijo sobre lo cerca que estuvo de su cabeza la bala disparada por Thomas Matthew Crooks, de 20 años.

El magnate neoyorquino llegó este domingo a Milwaukee (norte) donde esta semana será coronado candidato presidencial en la Convención del Partido Republicano.

A lo largo del día se empezaron a conocer detalles del autor de los disparos y de las víctimas del tiroteo, que segó la vida del partidario del republicano Corey Comperatore, un bombero de 50 años que deja esposa y dos hijas.

“Murió protegiendo a su familia de las balas”, dijo Biden.

Otros dos asistentes al último mitin de Trump antes de su nominación, resultaron heridos y su estado es “estable”. Se trata de David Dutch, de 57 años, y James Copenhaver, de 74, según la policía.

Solitario

Francotiradores del Servicio Secreto abatieron a Crooks después de que éste realizó disparos desde un tejado situado a 150 metros del lugar del acto electoral con un rifle “AR 556″ comprado legalmente.

El FBI investiga el incidente como “un intento de asesinato” pero no descarta que se trate de “un posible acto de terrorismo interno”, dijo Robert Wells, subdirector de la división antiterrorista del FBI.

Algunas personas que lo conocieron describen al joven como “tranquilo” y “solitario”, aunque las autoridades siguen recabando información sobre sus motivaciones.

El padre del tirador, Matthew Crooks, declaró a la CNN que estaba tratando de procesar “lo que estaba pasando”.

En su auto, aparcado cerca del recinto ferial del acto electoral, los investigadores encontraron un “dispositivo sospechoso” y estaban analizando su teléfono para intentar comprender las motivaciones del incidente más grave ocurrido en la política estadounidense en décadas.

Teorías conspirativas

Ante las críticas y la incomprensión de que algo así haya podido ocurrir en medio del fuerte dispositivo de seguridad del Servicio Secreto que protege a presidentes y expresidentes, Biden dijo que había ordenado una revisión completa de la seguridad en el mitin, así como en la Convención Nacional Republicana en Milwaukee.

“Estamos totalmente preparados y tenemos un plan de seguridad integral en marcha, y estamos listos”, dijo a la prensa el domingo, Audrey Gibson-Cicchino, coordinadora del servicio secreto para la convención republicana. Trump estará protegido por el “más alto nivel de seguridad”, agregó.

El portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, rechazó las afirmaciones “absolutamente falsas” de que se había denegado protección adicional a Trump antes del mitin del sábado.

El intento de asesinato ha desatado teorías conspirativas y acusaciones por parte de los republicanos.

El posible candidato a la vicepresidencia de Trump J.D. Vance dijo que la “retórica” de Biden había “conducido directamente” al ataque contra Trump.

Estados Unidos tiene un largo historial de violencia política y los presidentes, expresidentes y candidatos cuentan con estrictas medidas de seguridad. El presidente John F. Kennedy fue asesinado en 1963, mientras que Ronald Reagan fue tiroteado pero sobrevivió a un intento de asesinato en 1981.