La crisis financiera en el sector gastronómico, a nivel mundial, parece no mejorar, pues muchos restaurantes se han visto obligados a cerrar sus puertas debido a los grandes problemas económicos que no dan espera.

El último caso conocido es el del restaurante Roti, el cual se declaró en bancarrota.

Este establecimiento, reconocido en Estados Unidos por su oferta de comida mediterránea, reveló que iniciaría un proceso de reorganización con el objetivo de encontrar nuevos inversores o compradores en un plazo acelerado.

Varios colaboradores se verán afectados.

Ante la decisión, el director ejecutivo de Roti, Justin Seamonds, indicó que “la presentación del Capítulo 11 fue la mejor manera de abordar nuestros desafíos, incluido el desempeño financiero, los costos más altos, el rendimiento desigual de nuestras ubicaciones y las difíciles condiciones del mercado, mientras permanecemos abiertos y enfocados en brindar ‘Food For a Full Life’ a cada uno de nuestros clientes”.

De acuerdo con Seamonds, el propósito del restaurante es buscar nuevos inversores o compradores en un plazo acelerado, mientras se reorganizan las finanzas y se garantiza que las sucursales de Roti en Chicago, Minneapolis y las áreas metropolitanas de Washington, DC, sigan operando con normalidad.

Aunque el establecimiento se declaró en bancarrota, este le aclaró a sus comensales que seguirá ofreciendo su menú completo, servicio de catering, programas de fidelización y su experiencia de línea de productos en todas sus sucursales.

El portal Fox Business, dio a conocer que la reconocida cadena de restaurantes aseguró que la emergencia sanitaria del Covid-19 la afectó bastante, sobre todo porque la mitad de sus restaurantes estaban en zonas comerciales.

Además, resaltó que, en el documento de quiebra, se establece que la compañía tiene sus pasivos estimados entre 1 y 10 millones de dólares.

En la actualidad, Roti cuenta con 19 locales abiertos, que se extienden por las localidades de Illinois, Maryland, Minnesota y el Distrito de Columbia.