Momentos de tensión viven los ciudadanos de Ecuador ante los múltiples hechos de violencia que se han presentado en las últimas horas y que llevaron al presidente de la nación, Daniel Noboa, a declarar un ‘Conflicto armado interno’ y a decretar el estado de excepción y toque de queda nocturno desde las 11:00 p. m. hasta las 5:00 a. m.
En medio del caos, los presos de varias cárceles del país aprovecharon para tomar el control al interior de estas, secuestrando cientos de guardas penitenciarios que han mostrado en videos, para mandarle mensajes al Presidente Noboa.
Es importante recordar que los guías penitenciarios quedaron secuestrados como resultado de una serie de motines en las cárceles, que culminaron con la fuga de los líderes principales de varias bandas criminales vinculadas al narcotráfico, como Adolfo Macías Villamar, alias ‘Fito’, quien lideraba Los Choneros y estaba detenido en Guayaquil.
Sin embargo, en diferentes imágenes compartidas en redes sociales y que aún no ha sido confirmadas por las autoridades, se evidencia a además del secuestro, el asesinato a sangre fría de varios uniformados.
Encapuchados ejecutan a guías penitenciarios
Uno de los sucesos aterradores que quedaron registrados es la de un hombre encapuchado, aparentemente en un centro reclusorio que exige cambios al presidente y amenaza con guerra si no hay diálogo. En un acto escalofriante, dispara en la cabeza a un guía penitenciario, seguido de cinco disparos más cuando la víctima yace en el suelo.
En otro de los videos difundidos, se escucha decir a uno de los criminales que si no hay diálogo con el presidente, habrá más muertes de uniformados, seguido de eso, se observan a varios guardas tendidos en el piso boca abajo. Los encapuchados arrastran a uno de estos, y sin mediar palabra, lo cuelgan del cuello con una cuerda. Pese a que el uniformado intenta resistir, finalmente falleció ahorcado a mano de los criminales.
Estos eventos revelan una situación alarmante en Ecuador, con un aumento de la violencia y una creciente cifra de muertos y heridos debido a la rebelión en las cárceles.