Hace ya casi un año, el miércoles 2 de agosto de 2023, tanto el país como el mundo conoció la noticia del doloroso y macabro homicidio del cirujano plástico colombiano Edwin Arrieta en Tailandia, quien el presunto responsable fue el chef español Daniel Sancho, con quien se presume que sostenía una relación sentimental.
Cabe recordar que Daniel Sancho en la actualidad se encuentra recluido en la cárcel de Koh Samui, ubicada en la isla de Koh Samui, donde está a la espera de que salga la sentencia por el crimen del cirujano plástico colombiano. Recientemente, el programa radial ‘La Noche de Adolfo Arjona’ de la emisora Cope sostuvo diálogo con una fundación que visitó el lugar y detalló cómo es un día en la cárcel donde el chef Daniel Sancho se encuentra recluido.
La cárcel de Koh Samui pasó de ser una prisión normal, y en los últimos meses ha llamado la atención de algunos medios de comunicación españoles, ya que precisamente allí se encuentra recluido su compatriota Sancho a la espera de una sentencia por “matar y descuartizar a un hombre (Edwin Arrieta)”.
Javier Casado, director de la ‘Fundación +34′ que tiene como objetivo trabajar con españoles desamparados en el extranjero, explicó en entrevista con el medio radial mencionado que las prisiones tailandesas tienen fama de que los sentenciados viven en malas condiciones debido al hacinamiento, ya que en este país hay más de 300.000 presos.
“Para que nos hagamos una idea, en España hay 50.000 presos, en un país con el doble de población que en Tailandia”, afirmó Casado.
Además, el director de la fundación aseguró que Daniel Sancho es el preso más conocido del lugar y señala que en la prisión de Koh Samui se reciben a personas que cometen cualquier tipo de crimen al interior de la isla tailandesa, “desde un ladrón, alguien detenido por tráfico de drogas o, como en el caso de Sancho, por un asesinato”.
Según Casado, un día en la cárcel de Koh Samui se realiza el primer recuento de presos sobre las 6 de la mañana, dos horas después suena el himno nacional de Tailandia y la jornada de los presos concluye siendo las 9 de la noche, momento en que se realiza el último conteo y desde entonces el silencio debe reinar.
El ciudadano español señala que los presos con los que su fundación ha trabajado le han asegurado que las celdas de la cárcel de Koh Samui “tienen un tamaño común, como media cancha de tenis (diez metros por diez metros), asegura que en este lugar hay entre cincuenta o sesenta personas, y en una esquina, hay un agujero en el que tienen que hacer todas sus necesidades antes de abandonar la celda”.
“Una vez que salen, se dirigen al recuento, toman un poco de arroz de desayuno y tratan de pasar el día de la mejor forma posible porque en el patio se produce el mismo hacinamiento que hay dentro de la celda”, agregó el director de la ‘Fundación +34′.