El expresidente fue acusado por la oficina del Fiscal de Distrito de Manhattan de 34 delitos penales estatales entre los que se encuentran la falsificación de registros comerciales, específicamente relacionados con 11 facturas, 12 vales y 11 cheques.
Tras su segundo día de deliberaciones, Trump llegó al tribunal de Manhattan y volvió a llamar “corrupto” al juez Juan Merchan, que preside el proceso y que lo ha amonestado por sus reiterados ataques públicos.
“Sólo quiero decir que es un día muy triste para Estados Unidos (...). Está todo amañado”, agregó el magnate, que debe permanecer en las instalaciones del tribunal hasta que concluyan las deliberaciones.
Precisamente será el juez Juan Merchan el que se encargará de fijar la pena unas semanas más tarde.
Cabe mencionar que la falsificación de documentos contables se castiga con hasta cuatro años en el estado de Nueva York, pero los expertos consideran improbable esa pena para alguien sin antecedentes penales.
Laura Coates, analística jurídica de CNN, explicó que de ser declarado culpable de todos los cargos, Trump podría enfrentarse a más de una década de prisión.
“Los 34 delitos graves están clasificados como delitos de clase E en Nueva York, el nivel más bajo de delitos graves en el estado”, dijo.
La pena máxima por cada cargos es de cuatro años. Sin embargo, Nueva York limita la condena por este tipo de delito a 20 años.
“Queda a discreción del juez decidir si esas penas se ejecutarán de forma simultánea o consecutiva. Dado que se trata de delitos no violentos y que Trump no tiene antecedentes penales, el juez también podría considerar la posibilidad de encarcelarlo por un periodo que no sea más que una fracción de la pena máxima”., recalcó.
Para Coates, existe la posibilidad de que el juez prescinda de la prisión y lo ponga en libertad condicional. Eso sí con la posibilidad de encarcelarlo si no llega a cumplir con ciertas condiciones.