Un alto cargo del ejército estadounidense expresó el jueves su profunda preocupación por la suerte de un soldado estadounidense retenido por Corea del Norte.
El soldado de segunda clase Travis King debía regresar a Estados Unidos para enfrentarse a consecuencias disciplinarias a principios de esta semana, tras cumplir condena en Corea del Sur, cuando salió del aeropuerto, se unió a un recorrido por la frontera y huyó al cruzar a Corea del Norte.
“Me tiene muy, muy preocupado que el soldado King esté en manos de las autoridades norcoreanas (...) Me preocupa el trato que puedan darle”, declaró la secretaria del Ejército, Christine Wormuth, en el Foro de Seguridad de Aspen.
Se refirió al caso de Otto Warmbier, un estadounidense que estuvo retenido durante un año y medio antes de ser liberado en un coma en Estados Unidos y morir seis días después.
Wormuth dijo que Washington ha buscado información sobre King a través de los canales de la ONU, y que varias áreas del gobierno están involucradas en el esfuerzo.
“El Departamento de Defensa, el Departamento de Estado, la Casa Blanca, estamos utilizando los canales de la ONU, hemos estado en contacto (con Corea del Norte) para obtener información sobre su situación y trabajar con ellos para tratar (...) de traerlo de vuelta”, señaló. Pero, “en este momento, no creo que se conozca mucho y tampoco creo que se haya establecido contacto de forma exitosa con las autoridades norcoreanas”.
Wormuth aseguró que King “se habría enfrentado a consecuencias adicionales” si hubiese regresado a Estados Unidos como estaba planeado, aunque no está claro si la pena de cárcel estaba sobre la mesa.
King “agredió a un individuo en Corea del Sur y había estado bajo custodia del gobierno surcoreano e iba a regresar a Estados Unidos y enfrentar consecuencias en el ejército. No estoy segura de que estaba lidiando con eso”, explicó. “Puede que no estuviese pensando con claridad, francamente, pero no sabemos”.
Cruzó la frontera “voluntariamente y sin autorización”
El soldado, identificado por el ejército estadounidense como Travis King, de segunda clase y que ha estado en el ejército desde 2021, cruzó la frontera “voluntariamente y sin autorización”, dijo el coronel Isaac Taylor, portavoz de las fuerzas estadounidenses en Corea.
El organismo está trabajando con el ejército de Pyongyang para “resolver este incidente”.
Mientras, un responsable administrativo en Seúl dijo a la AFP que “King fue excarcelado el 10 de julio después de unos dos meses en una prisión surcoreana por cargos de asalto”.
La cadena estadounidense CBS News, citando a funcionarios estadounidenses, dijo que el soldado de bajo rango estaba siendo escoltado a casa por razones disciplinarias, pero que logró salir del aeropuerto y unirse a un grupo de turistas.
El jefe del Pentágono, Lloyd Austin, dijo a los periodistas que Washington está “monitoreando e investigando de cerca la situación”.
“Pensé que era una broma”
Desde que terminó la guerra de Corea de 1950-1953, con un armisticio y no con un tratado de paz, los dos países siguen técnicamente en conflicto, y su frontera, muy vigilada, consiste en una zona desmilitarizada.
Soldados de ambos Estados trabajan frente a frente en la JSA, al norte de Seúl, supervisada por el mando de Naciones Unidas.
En 2019, el entonces presidente estadounidense Donald Trump se reunió con el líder norcoreano Kim Jong Un en la localidad fronteriza de Panmunjom, e incluso estuvo en territorio norcoreano al cruzar la línea de demarcación.
Un testigo, que afirmó haber participado en la misma excursión, declaró al canal CBS News que el grupo había visitado uno de los edificios de la zona cuando “ese hombre soltó un sonoro ‘ja ja ja’ y se puso a correr entre los dos edificios”.
“Primero pensé que era una broma mala pero, cuando no regresó, me di cuenta de que no era una broma y entonces todo el mundo reaccionó y las cosas se volvieron una locura”, explicó.