La petición que hace el ejército israelí este 3 de octubre es que se desocupen, de manera inmediata, unos edificios de los suburbios del sur de la ciudad de Beirut.

El conflicto se ha venido escalando con otros países y el ejército de Israel prometió que continuará asestando “duros golpes” a Hezbolá, en Líbano, donde sus tropas sostienen combates terrestres apoyados por ataques con aviones contra milicianos del movimiento islamista.

La aviación israelí atacó el jueves “el cuartel general de inteligencia” del movimiento, en las afueras de la capital libanesa, anunció el ejército. Hezbolá afirmó por su parte que un bombardeo golpeó un depósito cerca del aeropuerto de Beirut. (Photo by Stringer/picture alliance via Getty Images) | Foto: (c) Copyright 2024, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

Ataques en territorio libanés

Tras una ofensiva de intensos bombardeos contra la organización proiraní en Líbano, que abatió a varios dirigentes de Hezbolá y dejó más de 1000 muertos en todo el país, según las autoridades libanesas, el ejército israelí inició desde el lunes 30 de septiembre incursiones terrestres en el sur.

La aviación israelí atacó “el cuartel general de inteligencia” del movimiento, en las afueras de la capital libanesa, anunció el ejército. Hezbolá afirmó, por su parte, que un bombardeo golpeó un depósito cerca del aeropuerto de Beirut.

Casi un año después del estallido de la guerra en la Franja de Gaza, desencadenada por el ataque del grupo palestino Hamás el 7 de octubre de 2023 en suelo israelí, este país anunció, a mediados de septiembre, que el “centro de gravedad” del conflicto se desplazó hacia el norte, en la frontera libanesa.

Israel afirma que busca debilitar a Hezbolá - que inició hostilidades contra Israel en apoyo a su aliado Hamás en octubre del año pasado - para permitir el retorno de decenas de miles de personas desplazadas.

El jefe del Estado Mayor israelí, el general Herzi Halevi, prometió que sus fuerzas seguirán atacando las posiciones de Hezbolá y no permitirán que el movimiento islamista se vuelva a “asentar” en el sur de Líbano. “Los duros golpes contra Hezbolá (...) van a continuar”, afirmó el general en un discurso televisado.

El ejército libanés afirmó este jueves que, por primera vez desde hace un año, respondió a disparos israelíes en el sur de Líbano tras la muerte de dos de sus soldados.

Tensión en el Líbano tras la muerte del líder de Hezbolá Hassan Nasrallah. | Foto: Reuters/AP

El temor a una escalada del conflicto en Oriente Medio se intensificó después de que el martes 1 de octubre Irán lanzó casi 200 misiles contra Israel y el primer ministro de ese país, Benjamin Netanyahu, prometió que la República Islámica pagará por su “gran error”.

Los dirigentes de los países del G7 - Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Japón y Reino Unido - expresaron “su profunda preocupación por el deterioro de la situación en Oriente Medio”. “Un peligroso ciclo de ataques y represalias corre el riesgo de atizar una escalada incontrolable”, advirtieron.

Un conflicto que no cesa

Irán dijo que actuó en respuesta al asesinato del jefe de Hezbolá, Hasán Nasralá, el 27 de septiembre en un bombardeo israelí cerca de Beirut, y a la muerte del líder de Hamás, Ismail Haniyeh, abatido el 31 de julio en un ataque con explosivos en Teherán atribuido a Israel.

El presidente estadounidense, Joe Biden, declaró que está en conversaciones con Israel sobre la posibilidad de atacar las instalaciones petroleras iraníes, lo que impulsó los precios del crudo.

Antes del amanecer, las tropas israelíes bombardearon un centro de atención de emergencia gestionado por Hezbolá en pleno centro de Beirut, matando al menos a siete personas, según el grupo.

El ejército israelí anunció este jueves que mató a quince combatientes de Hezbolá en un bombardeo nocturno contra un “edificio de la Alcaldía de Bint Jbeil”, donde afirmó que “estaban almacenadas grandes cantidades de armas” de la milicia.

Un hombre inspecciona un edificio destruido por un ataque aéreo israelí en los suburbios del sur de Beirut, Líbano. | Foto: Copyright 2024 The Associated Press. All right reserved

Según cifras oficiales libanesas, cerca de 2000 personas han muerto en Líbano desde el inicio de los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá, en octubre de 2023, entre ellas más de mil desde el comienzo de los intensos bombardeos el 23 de septiembre contra el sur y el este del país y los suburbios del sur de Beirut.

Más de 40 rescatistas y bomberos murieron en tres días en los bombardeos israelíes, según las autoridades libanesas. El Gobierno de Líbano estima que alrededor de 1,2 millones de personas se han visto desplazadas por estos ataques.

“Vamos de una guerra a otra”, se lamenta Ahmad Mustafa, un sirio de 46 años que diez años después de haber huido al Líbano escapando de la guerra civil, volvió a su país con su mujer y sus tres hijos. La suspensión de los vuelos comerciales de varias aerolíneas llevó a varios gobiernos a organizar operaciones para evacuar a sus ciudadanos de Líbano.