El último fin de semana de campaña arrancó para Kamala Harris y Donald Trump, quienes, continúan en la búsqueda de los votos para ganar las elecciones en Estados Unidos.
La vicepresidenta demócrata y su rival, el expresidente republicano, siguen en empate técnico en las encuestas. Ambos se centran en los estados claves, donde los candidatos suelen ganar por la mínima, a diferencia de los otros que son tradicionalmente republicanos o demócratas.
Resulta importante mencionar que Harris aspira ser la primera mujer presidenta de Estados Unidos e inclusive, insistió a los votantes para que “pasen página” a Trump. “Es alguien que está cada vez más inestable, obsesionado con la venganza, consumido por el resentimiento, y el hombre busca un poder sin control”, les dijo a sus seguidores en Little Chute, Wisconsin.
Por su parte, Donald Trump quiere recuperar las llaves de la Casa Blanca. En caso de lograrlo, se convertiría en el primer presidente con una condena penal y cuatro inculpaciones a sus espaldas.
Las elecciones presidenciales se decidirán en siete estados claves. Encuestas revelan que Donald Trump solo tendría asegurados 219 votos mientras que Harris tendría casi 226 votos. Pero se necesitan por lo menos 270 electores a favor para ganar la presidencia.
Resulta importante recordar que el Colegio Electoral está conformado por un total de 538 electores. Es necesario 270 votos a favor del próximo presidente de Estados Unidos.
El sistema de elección de Estados Unidos es indirecto. Los votantes de cada estado eligen a los miembros de un colegio electoral encargado de nombrar al presidente. Pero los procedimientos de votación y recuento difieren entre estados.
Por ejemplo, Wisconsin y Pensilvania, dos estados clave, comienzan a contar los votos anticipados el día de las elecciones. Serán los medios de comunicación encargados de anunciar la victoria de Harris o Trump, lo que tiene al mundo a la expectativa.
Con información de AFP y de El País*