A pesar de estar envuelto en diferentes escándalos políticos y una investigación vigente por el mal uso dado a los documentos clasificados que fueron incautados por el FBI en su mansión en la Florida, Mar-a-Lago, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio un discurso en la conferencia anual de la Coalición Fe y Libertad, en el que se dedicó a hacer campaña para las próximas elecciones en 2024.
Muy a pesar de haber sido procesado por pagar un soborno a una estrella porno y declarado responsable en un juicio por abusos sexuales, los evangélicos estadounidenses no se cansan del magnate, y en medio de su intervención el empresario fue vitoreado y celebrado mientras afirmaba que iba a enfrentar la justicia para llegar a la Casa Blanca nuevamente.
Pero sin duda alguna, uno de los momentos más relevantes de su discurso fue cuando mencionó la presunta base militar china que se estaría desarrollando en Cuba, una situación que ha mantenido la tensión entre los tres países en los últimos meses, por la constante negación de China y la isla caribeña, así como por la insistencia estadounidense de los ejercicios de espionaje.
“Es increíble que esto esté siendo permitido, cuando sea reelecto presidente le diré a China que tienen 48 horas para remover todo el equipamiento militar y de espionaje de Cuba”, fue el corto mensaje de Trump en medio de su discurso, prometiendo acciones “inmediatas” a un flagelo que ha venido cargando el Gobierno Biden, puesto que también se han detectado presuntas infiltraciones de agentes chinos en Alaska.
Así entonces, Trump, quien tuvo una relación estrecha al inicio pero explosiva al final, con el presidente chino Xi Jinping, y que también tiene una gran base de seguidores cubanos en Florida, afirmó que no daría espera para intervenir la supuesta base de espionaje en La Habana si era electo nuevamente como presidente de Estados Unidos.
Su posición sobre el aborto
El expresidente Donald Trump, en su conferencia, dijo que el gobierno federal debe tener un “papel importante” en la oposición al aborto, pero una vez más no abundó en detalles específicos sobre las restricciones que apoyaría a nivel nacional si vuelve a ganar la Casa Blanca.
Trump manifestó su postura ante un grupo de evangélicos influyentes en el aniversario del fallo con que la Corte Suprema anuló el derecho constitucional al aborto, en contraste con Mike Pence, su exvicepresidente y contrincante por la candidatura presidencial republicana para el 2024.
Es de recordar que Pence desafío en la misma conferencia a los aspirantes a la nominación republicana a que apoyen una prohibición nacional al aborto por lo menos a las 15 semanas de embarazo. Sin embargo, Trump, que encabeza las encuestas, ha sido renuente a aprobar una prohibición nacional y ha dejado entrever que las restricciones deben ser decisión de los estados.
Incluso, afirmó que impulsar un aumento de las restricciones al aborto sería una desventaja política para los republicanos a pesar de que los tres ministros que nombró para la Corte Suprema conforman la mayoría que voto a favor de anular el fallo Roe vs. Wade el año pasado.
En su discurso ante la conferencia anual de la Coalición Fe y Libertad, Trump se abstuvo de dar una respuesta contundente, como ha sido su estilo. Dijo creer que “el mayor de los progresos se está logrando en los estados, donde todos querían que se diera”.
“Una de las razones por la que querían la revocación de Roe vs. Wade”, dijo, “es que la decisión regresara a los estados donde mucha gente considera firmemente que se está logrando el mayor de los avances provida”.
Pero el expresidente aseguró: “ahí, por supuesto, el gobierno federal continúa teniendo un papel vital para la protección de la vida futura”:
Trump dijo apoyar tres dispensas a las restricciones al aborto: en casos de violación e incesto o cuando la vida de la madre esté en peligro. Además, el exmandatario se adjudicó el crédito de la revocación del histórico fallo y afirmó que estaba “orgulloso de ser el presidente más provida en la historia de Estados Unidos”.
*Con información de AP.