El expresidente peruano Alan García aseguró este lunes que nada le involucra con el escándalo de sobornos de la empresa brasileña Odebrecht y reiteró que se sancione "a los que se han vendido", al acudir al Congreso para ser interrogado por la comisión que investiga el caso Lava Jato en Perú.

En declaraciones a la prensa, García dijo haber acudido a la citación "como corresponde, a dar explicación y responder por mis actos y por mi gobierno, en lo que a mí concierne".

El dos veces exgobernante añadió que "todos tenemos la obligación de venir", en referencia a los políticos citados por la comisión parlamentaria, así como también de "sancionar a los que se han vendido".

"No tengo nada que reprocharme, pues nada me involucra", con los sobornos que Odebrecht admitió haber entregado a funcionarios peruanos entre 2005 y 2014 en Perú, indicó García.

La Fiscalía de ese país investiga actualmente las dádivas que la empresa constructora entregó a funcionarios y un exviceministro del segundo gobierno de García por la construcción de la Línea I del Metro de Lima.

"Si otros se han corrompido, yo no", subrayó el líder del partido Aprista a su llegada al Parlamento.

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Al ser consultado sobre la decisión del actual presidente, Pedro Pablo Kuczynski, de no presentarse personalmente ante la comisión Lava Jato, García declaró que "si me tocara ser presidente, estén seguros que asistiría, más de ocho países viven esta misma situación, nadie puede escudarse en un privilegio".

El exmandatario agregó que explicará a la comisión, presidida por la fujimorista Rosa Bartra, todas las veces que se reunió con los directivos de Odebrecht durante su segundo gobierno, durante el cual la compañía estaba a cargo de ocho grandes obras de infraestructura.

"Todo eso lo explicaré ahora, para eso he venido, tengo las manos limpias y la conciencia limpia", aseguró.

García, que acudirá ante la comisión legislativa en condición de invitado, también será interrogado por el contrato de concesión de transporte de gas natural de Camisea en el sur del país, así como por otros temas vinculados a la investigación.

El exsecretario de la Presidencia durante el segundo gobierno de García, Luis Nava, declaró ante la comisión investigadora que el empresario Marcelo Odebrecht visitó el Palacio de Gobierno en cuatro oportunidades y que Jorge Barata, exrepresentante de la empresa brasileña en Perú, lo hizo hasta en 15 ocasiones.

En Perú, el caso Odebrecht se centra en seguir el rastro de 29 millones de dólares que la compañía brasileña admitió a la Justicia estadounidense haber pagado en sobornos a funcionarios peruanos a cambio de adjudicarse millonarias obras entre 2005 y 2014.

Ese período abarca los mandatos de Alejandro Toledo, con orden de captura por presuntamente haber recibido un soborno de 20 millones de dólares; Alan García (2006-2011), en investigaciones por dádivas para el Metro de Lima; y Ollanta Humala (2011-2016), encarcelado por la presunta financiación irregular de su partido.