El exfutbolista del F.C. Barcelona y empresario, Gerard Piqué, declaró en condición de investigado ante el Juzgado de Majadahonda, por el escándalo por las presuntas irregularidades que se habrían registrado en el traslado de la Supercopa de fútbol masculino a Arabia Saudí, entre la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y Sela Sport Company.
Según reveló la prensa española, durante el interrogatorio el hombre se echó a llorar, argumentando que esta indagación le habría causado un “enorme daño a su reputación”.
A pesar de esto, el interrogatorio continuó con total normalidad y el antes futbolista respondió a las preguntas formuladas por la jueza, la Fiscalía y la defensa.
La expareja de la cantante barranquillera Shakira fue incluido, desde hace ya 10 meses en la lista de imputados por este escándalo por decisión de la magistrada Delia Rodrigo, titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Majadahonda.
En este listado también figuran los nombres de Luis Rubiales y Pedro Rocha, expresidentes de la RFEF.
Según el auto judicial de mayo en el que se anunció la imputación del antiguo defensa del Barça, se señala que los hechos investigados “tienen su origen en las posibles ilegalidades con trascendencia penal en la contratación de acuerdos” firmados el 11 de septiembre de 2019, entre la RFEF y la entidad saudí.
En esos contratos por la disputa de la competición en Arabia, firmados por 40 millones de euros anuales en favor de la Federación, durante seis años; se fijó una prima de éxito equivalente a 4 millones de euros al año para una tercera parte agente no identificada.
La cláusula incluida dicta que tiene como propósito “garantizar el pago de la comisión de 4 millones de euros (equivalentes a 4,3 millones de dólares) anuales en favor de Kosmos”, la empresa de Piqué, señaló el texto.
Kosmos medió en esa operación cuando el español aún se desempeñaba como jugador del Barça.
En virtud de aquel acuerdo, la Supercopa empezó a celebrarse en Arabia Saudita en 2020.
La investigación del exjugador español se deriva de una causa contra el expresidente de la RFEF, Luis Rubiales, por supuesta corrupción y presuntos contratos irregulares durante su mandato, entre los cuales se encuentra el acuerdo para mover la Supercopa.
La fecha de la comparecencia de Piqué se conoció hace un mes, el pasado 14 de febrero, día en que concluyó y quedó visto para sentencia el juicio a Rubiales por agresión sexual y coacciones, por el beso en la boca que le dio a la jugadora Jenni Hermoso en la entrega de medallas de la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia/Nueva Zelanda 2023.