El grupo terrorista Hamás propuso una tregua de dos fases a Israel para terminar la guerra en medio oriente.
Hamás ha presentado a los mediadores, Egipto, Qatar y EE.UU, una nueva propuesta de alto el fuego que incluye una primera etapa en la que liberaría a mujeres (incluyendo soldadas), niños y personas mayores de entre los rehenes que tiene en su poder.
Lo anterior, a cambio de entre 700 y 1.000 prisioneros palestinos, entre ellos 100 condenados a cadena perpetua.
Tras esa primera etapa, Hamás e Israel tendrían que acordar un plazo para una retirada israelí de Gaza y un alto el fuego permanente para, en una segunda etapa, liberar a todos los rehenes.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, calificó durante la noche de este jueves de “poco realistas” las propuestas de Hamás. Por su parte, el barco español Open Arms, que transporta 200 toneladas de comida, está ya frente a las costas de Gaza, preparado para entregar toda la ayuda humanitaria.
El jueves, 14 de marzo, un ataque israelí durante un reparto de ayuda humanitaria en Ciudad de Gaza, mató al menos a 20 personas e hirió a más de un centenar, según el Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás.
Por su parte, el ejército israelí negó a través de un comunicado estas acusaciones: “las informaciones de prensa según las que las fuerzas israelíes atacaron a decenas de gazatíes en un punto de distribución de ayuda son erróneas”.
El ejército asegura “estudiar el incidente minuciosamente”, pero no detalla por ahora su versión de los hechos.
Cabe destacar que a finales de febrero, Hamás denunció que más de un centenar de palestinos perdieron la vida por disparos israelíes durante un reparto de ayuda humanitaria en el norte de este territorio.
Las fuerzas israelíes reconocieron entonces haber abierto fuego contra los palestinos porque sus soldados se habían sentido “amenazados”.