Doce personas murieron asfixiadas en una mina de oro cerrada en El Callao, en el sureste de Venezuela, afirmó este sábado un funcionario del lugar.
“Al día de hoy tenemos 12 fallecidos, quienes ingresaron en una mina que estaba clausurada hace mucho tiempo”, dijo el secretario de Seguridad Ciudadana del estado de Bolívar, el general Edgar Colina Reyes, en conversación telefónica.
El accidente se produjo el miércoles: “La mina se inundó por las lluvias”. Lo que hizo que “estos mineros artesanales perdieran el oxígeno y fallecieran por insuficiencia respiratoria”, explicó el general, quien además precisó que siete cuerpos fueron recuperados el sábado y cinco el viernes, y resaltó que se encuentran en la morgue para su identificación.
Cabe recordar que en el 2021, el derrumbe de una galería en una mina de la misma zona causó un muerto, en tanto que 34 personas pudieron ser rescatadas.
Las explotaciones de oro, legales e ilegales, abundan en el sur del país. Los mineros trabajan frecuentemente en condiciones difíciles y los accidentes son comunes. Amplias zonas de esta región son presas de bandas armadas criminales.
Otras siete personas murieron en ataque por conflicto de tierras en Chiapas
Siete personas murieron en un ataque armado relacionado con pleitos por tierras entre comunidades indígenas en Chiapas, en el sur de México, una conflictiva y violenta región donde hace tres décadas estalló el levantamiento zapatista, dijeron autoridades.
Las víctimas son indígenas tsotsiles “desplazados” del municipio de San Pedro Chenalhó, en el centro del estado, informó la fiscalía estatal en un comunicado este sábado. “Fueron atacados con armas de fuego, resultando un saldo de siete personas muertas y tres heridas”, detalló la dependencia.
El ataque estuvo dirigido contra el grupo de más de 200 personas que desde octubre pasado debieron dejar sus viviendas a causa de un conflicto agrario interno, contaron los pobladores de la zona que solicitaron anonimato por razón de seguridad.
Según estos mismos testimonios, la agresión se dirigió también a los dueños de la bodega donde se hallan refugiados. “No hay seguridad para los desplazados” pese a que ya se solicitó al gobierno estatal, denunció José Vázquez Gutiérrez, activista local y representante del grupo de indígenas.
“Nosotros como defensores ya estamos perseguidos y amenazados de muerte”, declaró.
La fiscalía detalló que el grupo de personas armadas se presentó la noche del viernes en la bodega, ubicada en la comunidad de Polhó. Dicha comunidad es cercana a la localidad de Acteal donde en 1997 un grupo armado de corte paramilitar asesinó a 45 indígenas tsotsiles cuando participaban de una ceremonia religiosa.
Chiapas celebrará el 1 de enero próximo el trigésimo aniversario del levantamiento encabezado por el Ejercito zapatista de Liberación Nacional (EZLN), que fue noticia mundial, con la carismática figura del subcomandante Marcos y su pasamontaña.
En febrero de 1996 se suscribieron los acuerdos de San Andrés entre el gobierno federal y el EZLN sobre derecho y cultura indígenas. Aunque la capital de Chiapas, San Cristóbal de las Casas, se convirtió en una plaza fuerte del turismo internacional en México, la situación se mantiene tensa en varias zonas del estado.
Los conflictos por tierras son comunes entre comunidades indígenas mexicanas, las cuales se rigen habitualmente por sus usos y costumbres, lo que en ocasiones dificulta la intervención del Estado en su resolución. Algunas de estas comunidades están vinculadas además con partidos políticos y otros grupos de poder de dichas zonas, incluso organizaciones criminales.
De acuerdo a los primeros reportes , en las últimas horas un grupo de personas armadas se presentaron en una bodega ubicada en la comunidad Polhó, municipio de Chenalhó, en la que se encuentran refugiadas personas desplazadas de la comunidad Santa Martha, del mencionado municipio, donde comenzaron a realizar detonaciones con armas de fuego”, mencionó Isaín Mandujano, periodista del Estado de Chiapas.