El ejército israelí bombardea intensamente este sábado, 3 de febrero, la ciudad de Rafah, en el extremo sur de la Franja de Gaza, colapsado por más de un millón de palestinos que huyen de los combates en este territorio.
En medio de negociaciones para intentar establecer una nueva tregua en Gaza, esta ciudad fronteriza con Egipto fue blanco de potentes ataques aéreos.
Una ráfaga de ataques aéreos y disparos de tanques sacudió también Jan Yunis, afirmó un periodista de AFP. La principal ciudad del sur de Gaza se ha convertido en las últimas semanas en el principal foco de la ofensiva israelí.
El ministerio de Salud de este territorio, controlado por el movimiento islamista Hamás, aseguró que al menos 100 civiles murieron por la noche en toda Gaza. El ejército israelí reportó por su parte que mató a “decenas de terroristas” en el norte y el centro de Gaza en las últimas 24 horas.
Desde que estalló la guerra el 7 de octubre entre Israel y Hamás, cientos de miles de palestinos desplazados por los combates han huido a Rafah, donde se hacinan en tiendas de campaña.
Según testigos, 12 personas murieron en un ataque aéreo contra una casa. “Bombardearon sin previo aviso”, dijo Bilal Jad, de 45 años, un vecino cuya casa resultó dañada. “No hay ningún lugar seguro”, lamentó.
“Escapamos de la muerte”
Según la ONU, más de 1,3 millones de los 2,4 millones de habitantes de Gaza son ahora refugiados en Rafah, una ciudad que tenía unos 200.000 habitantes antes de la guerra. Los desplazados se amontonan cerca de la frontera cerrada con Egipto, amenazados por el hambre y las epidemias, en pleno invierno.
Uno de ellos, Abdulkarim Misbah, contó que huyó primero de Jabaliya, en el norte, a Jan Yunis, en el sur, antes de verse obligado a desplazarse nuevamente debido a los combates. “Escapamos de la muerte la semana pasada en Jan Yunis, no pudimos llevarnos nada”, detalló el hombre de 32 años.
El conflicto se desató hace casi cuatro meses con la incursión en suelo israelí de comandos islamistas que mataron a unas 1.160 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a cerca de 250 en el sur de Israel, según un balance de la AFP a partir de datos oficiales israelíes.
Una primera tregua en noviembre permitió liberar a un centenar de rehenes, pero Israel afirma que 132 siguen retenidos en Gaza, de los que se sospecha que al menos 27 han muerto.
En respuesta al ataque de Hamás, catalogado como grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea, Israel lanzó una ofensiva sobre Gaza que dejó hasta el momento 27.238 muertos, en su mayoría mujeres y menores, según el más reciente balance del ministerio de Salud del movimiento palestino.
Negociaciones para una segunda tregua
Frente a esta grave crisis humanitaria y a las enormes pérdidas civiles, diplomáticos se activan entre bastidores para lograr una segunda tregua, tras la de una semana a finales de noviembre.
Se espera la llegada a Egipto del jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, que reside en Catar, para hablar sobre una propuesta elaborada en una reunión a finales de enero en París entre representantes de Estados Unidos, Catar, Egipto e Israel.
Según una fuente de Hamás, la propuesta está compuesta de tres fases. La primera incluiría una tregua de seis semanas, un canje de entre 200 y 300 presos palestinos por entre 35 y 40 rehenes y la entrada diaria de entre 200 y 300 camiones de ayuda humanitaria a Gaza.
Catar había informado que Israel había aprobado la propuesta y que disponían de “una confirmación preliminar positiva por parte de Hamás”, aunque una fuente del grupo señaló que “no hay aún acuerdo sobre la implementación”.
Hamás exige la retirada israelí de Gaza, pero el primer ministro Benjamin Netanyahu ha reiterado que no pondrán fin a su ofensiva hasta que Hamás sea erradicado y todos los rehenes sean liberados.
Gira de Blinken
En medio de estas negociaciones, el jefe de la diplomacia estadounidense, Antony Blinken, parte el domingo para una gira regional con paradas en Catar, Egipto, Israel, Cisjordania y Arabia Saudita.
El diplomático presionará para conseguir la liberación de rehenes a cambio de una “pausa humanitaria”, dijo el Departamento de Estado.
Este nuevo viaje de Blinken está precedido por bombardeos de Estados Unidos contra posiciones de grupos proiraníes en Siria e Irak en represalia a la muerte de tres de sus soldados en una base de Jordania, que Washington atribuyó a organizaciones respaldadas por Teherán.
El presidente Joe Biden aseguró que su país “no busca conflictos en Oriente Medio”, pero advirtió que la respuesta a estos ataques “continuará”.
Mientras tanto, en Líbano, el ejército israelí dijo que sus aviones de combate atacaron objetivos del grupo Hezbolá, respaldado por Irán.
La guerra en Gaza exacerbó las tensiones entre Israel y su aliado estadounidense por un lado y el llamado “eje de la resistencia”, que incluye a Hamás, el grupo chiita libanés Hezbolá, milicias iraquíes y rebeldes hutíes en Yemen.
*Con información de AFP.