Las nubes, por momentos, suelen tomar formar extrañas, un hecho que llama la atención de las personas, ya que cuando esto sucede, aquellos que perciben estos raros sucesos de la naturaleza se encargan de darle un significado particular o lo llegan a interpretar como una señal divina.
Este es el caso de una nube que tomó la figura de un hombre hablando de lado. La imagen de esta nube fue compartida en la red social X, donde varios internautas comentaron que la figura se parecía a Jesús.
Asimismo, otros usuarios de X (antes Twitter), dijeron que la forma que tomaba la nube era similar a la de “Godzilla”, incluso, afirmaron que era “un holograma en proceso”.
Cabe mencionar que en la misma red social, se conoció que este hecho se presentó en los cielos de Indonesia.
La extraña figura de la nube fue también relacionada con un evento místico y religioso, de hecho, afirmaron que se parecía a Jesús de Nazareth.
“O Godzilla o Jesús”; “Jesús viene pronto”; “Parece Jesús, en serio jajaja”; “Parece una sombra de un hombre real”; “Dios ha llegado por fin”; “¡Cristo, ha vuelto!”, fueron algunas de las reacciones de los internautas al ver la publicación en instantes se volvió bastante viral.
Por ahora, se desconoce el lugar específico en el que se presentó este raro suceso. Se debe anotar que las imágenes le han dado la vuelta al mundo y ha impactado a miles de usuarios en las redes sociales.
¿Por qué las nubes toman estas extrañas figuras?
Las nubes son uno de los fenómenos meteorológicos más recurrentes que vemos en los cielos. Estas suelen ser de varios tipos, formas, texturas o incluso colores.
De acuerdo con ‘National Geographic’, las nubes son formadas por los ascensos de las masas de aire y la condensación del vapor de agua, además, pueden indicar situaciones de tiempo estable, desarrollo de fuertes vientos o bruscos de tormentas en la atmosfera.
Paracaidista registra impactante video en el interior de una nube
El pasado miércoles 9 de agosto, un deportista español se hizo rápidamente viral gracias a las maniobras que realizó durante un salto de paracaidismo.
En las imágenes, que fueron compartidas por el mismo deportista en sus redes sociales, se puede apreciar como este paracaidista cae al interior de una nube.
Las impresionantes imágenes publicadas por este deportista se hicieron rápidamente viral y se llevó los halagos y aplausos de todos los internautas.
“Qué locura, me sudan las manos solo de verte”, “¿No es peligroso pasar dentro de nubes? Pregunta honesta pq es increíble lo que haces”, “Qué haaaceeee , estas loco jajajaja”, fueron algunos de los comentarios que recibió Finat en sus redes sociales tras hacer la peligrosa manobra.
Nubes de colores en Antioquia
Hace algunos meses, exactamente en mayo de 2023, el cielo colombiano dio varios espectáculos tanto en el día, como en la noche, especialmente durante las últimas fechas con luna llena.
Sin embargo, un show sin precedentes ocurrió la tarde del lunes, cuando el cielo del Valle de Aburrá, área Metropolitana ubicada en el centro-sur del departamento de Antioquia, se puso de colores.
Fueron muchos los usuarios que decidieron compartir este espectáculo natural en sus redes sociales, cuestionándose el origen de estas coloridas nubes.
No se trataba de magia, ni fuegos artificiales en plena luz del día, la respuesta está en un fenómeno meteorológico, que Según Sistema de Alerta Temprana de Medellín y el Valle de Aburrá, que mide funciona como radar meteorológico, se trató de unas nubes iridiscentes, nubes de colores que se originan por la difracción de la luz solar.
Su origen es la difracción de la luz solar al incidir en las partículas (cristales, hielo o gotas de agua) de la nube. Su aparición requiere que las partículas sean pequeñas (de pocos micrómetros), que estén estratificadas en capas con partículas de tamaño similar (si los tamaños varían mucho en cada capa el color se vuelve blanquecino) y que las nubes sean tenues (para que la luz atraviese solo una partícula y no varias).
Este fenómeno no es común, ya que, por lo general, ocurre en nubes altas o delgadas como los altocúmulos o las nubes lenticulares.
Para los amantes del arte celestial, la forma más sencilla de ver nubes iridiscentes es ocultando el sol con la mano o con un edificio o árbol. También se pueden utilizar gafas de cristales oscuros o viendo el cielo mediante un reflejo en el agua. Normalmente, los colores se pueden ver en los extremos de nubes finas, aunque al volverse más gruesas poco a poco pierden esas tonalidades pasteles.
Popularmente, se ha creído que cuando aparecen en el cielo nubes iridiscentes, se aproxima un terremoto. De hecho, desde hace siglos numerosos testigos han afirmado ver extrañas luces en el cielo antes de que se produzca un terremoto. Por ejemplo, antes del terremoto que azotó la provincia China de Sichuan en 2008, se grabaron estas nubes.
Algunos investigadores afirman que este tipo de luces pueden ser un indicador vital para saber que se va a producir un terremoto inminente, sin embargo, no hay pruebas de una relación, por lo que podría tratarse de un mito.
Algunos atribuyen esta creencia al trabajo del químico chino Zhonghao Shou, el cual mencionaba que el movimiento de las capas tectónicas provocaba que el agua subterránea originara un vapor que después salía por las zonas de fractura en la tierra.
El vapor caliente llegaba al cielo y al encontrarse con temperatura fría formaba las nubes aborregadas; lo que sugería que en esa área se iba a producir un sismo.
Sin embargo, Zhonghao Shou nunca pudo determinar una manera clara para diferenciar una “nube sísmica” de una creada por fenómenos meteorológicos, ya que, en realidad, las condiciones de presión y humedad sí son capaces de generar diversos tipos de nubes.
Según algunos expertos, cuando estas formaciones aparecen de manera aislada, en pequeños grupos, podemos esperar “buen tiempo“, específicamente sin lluvia.
Sin embargo, si estas nubes aumentan gradualmente de tamaño y se mezclan con las de gran altitud sin dejar el cielo azul entre ellas, habrá cambios frecuentes en el clima y la aparición de lluvias en un corto período de tiempo.