El expresidente de Estados Unidos Donald Trump, aspirante a la Casa Blanca, celebró el hundimiento del proyecto de ley que buscaba abordar la crisis migratoria en la frontera con México y prometió, de ser elegido, realizar una masiva “operación de deportación” en su primer día en el cargo.
El abandono del proyecto bipartidista la semana pasada en el Senado estadounidense puso de relieve el férreo control de Trump sobre el partido Republicano, al negarle a Biden una victoria en el candente tema de la inmigración.
“No olvidemos que esta semana también tuvimos otra gran victoria que debe celebrar cada uno de los conservadores. Aplastamos el desastroso proyecto de ley de fronteras abiertas del corrupto Joe Biden”, declaró Trump en un mitin en Carolina del Sur.
“Todo el grupo hizo un gran trabajo en el Congreso. Lo aplastamos”, agregó. Bajo la presión de Trump, que quiere explotar la inmigración percibida como una debilidad de Biden, los legisladores republicanos parecen decididos a frenar cualquier reforma fronteriza hasta las elecciones de noviembre.
Trump declaró que deportar migrantes sería una de sus primeras tareas. “El primer día acabaré con todas las políticas de fronteras abiertas de la administración Biden e iniciaremos la mayor operación de deportación nacional en la historia de Estados Unidos. No tenemos opción”, dijo.
El proyecto de ley de fronteras en el Senado incluía ayudas para Ucrania e Israel, pero los republicanos rechazaron la propuesta el miércoles. La cámara alta considera ahora un paquete de ayuda exterior que excluye el tema de la frontera.
El paquete de ayuda por 95.000 millones de dólares que entrará a debate incluye ayuda para Israel en su guerra contra Hamás y para su aliado estratégico Taiwán. La mayor parte, sin embargo, sería en ayuda a Ucrania para reponer su agotado arsenal.
El expresidente además advirtió que no defendería a países de la OTAN que estén en mora de sus pagos y que incluso alentaría a Rusia a atacarlos. A menudo, Trump reprocha a miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) por no financiar lo suficiente a la Alianza.
En su discurso durante un mitin político el sábado en Carolina del Sur, Trump mencionó una conversación con un gobernante de la OTAN, sin precisar quién.
“Uno de los presidentes de un gran país se levantó y dijo ‘Bueno señor, si no pagamos y Rusia nos ataca ¿Nos protegerá?”, contó el magnate antes de revelar su respuesta: “No, no les protegería, de hecho animaría (a Rusia) a hacer lo que les de la gana. Deben pagar sus deudas”.
“Alentar invasiones de nuestros más cercanos aliados por parte de regímenes asesinos es espantoso y desquiciado”, fue la reacción de la Casa Blanca por medio de su portavoz Andrew Bates. “Más que hacer llamados a la guerra y promover el caos, el presidente Biden seguirá apoyando el liderazgo estadounidense”, agregó el vocero.
*Con información de AFP.