Cápsula de suicidio asistido divide opiniones en Suiza: el ‘Doctor Muerte’, su creador, asegura que el país está listo para usarlas.
En Suiza, el suicidio asistido es legal desde 1942, y ahora lo que está causando revolución es una nueva máquina diseñada por el doctor Philip Nitschke, conocido como el ‘Dr. Muerte’.
Se trata de un cápsula denominadas ‘Sarco’, pero que popularmente se conoce como la ‘cápsula del suicidio’. Según su creador, en conversación con el medio británico The Daily Mail, , ya hay personas interesadas en ser pioneras en su utilización. El médico australiano afirma haber consultado con abogados suizos para garantizar el cumplimiento de los requisitos legales antes de su implementación.
‘Sarco’ es un dispositivo portátil creado mediante impresión 3D. Producidas por Exit International, una organización sin fines de lucro liderada por Nitschke. Tienen un costo de entre 4.000 y 8.000 dólares y se encuentran en las etapas finales de preparación para su uso en Suiza.
¿Cómo funciona?
La máquina se activa cuando la persona se introduce en ella. Una vez adentro, debe responder tres preguntas específicas y si las respuestas son afirmativas, el software activa la liberación de nitrógeno. Este método busca proporcionar una muerte rápida al reducir los niveles de oxígeno en un lapso de 30 segundos.
Hay que aclarar que no cualquier persona puede acceder a esta máquina. Es necesario que la persona sea miembro de Exit International, con un costo de registro de cien dólares. Además, el individuo debe demostrar su capacidad mental para decidir poner fin a su vida, según las leyes suizas.
Con esta máquina los suizos tendrán otra alternativa, según Nitschke, pues en Suiza hasta ahora está autorizado el suicidio pero con el método tradicional de ingerir un fármaco, que presenta limitaciones como la capacidad de tragar la pastilla y la posibilidad de vómito.
Las críticas
James Mildred, director de participación de la Agencia Humanitaria Internacional Care, sostiene que el dispositivo “embellece el suicidio” y ha sido condenado por diversos comentaristas. Asegura que existen formas éticas de ayudar a los individuos sin recurrir a la “destrucción de la vida”, considerando el suicidio como una “tragedia que las sociedades deben prevenir en cualquier circunstancia”.
Hasta el momento, el Gobierno suizo no se ha pronunciado oficialmente sobre considerar este “avance” tecnológico, por lo que se espera que lo haga para saber si el sueño del ‘Doctor Muerte’ se vuelve realidad o no.