La terraza del bar-restaurante que el jueves pasado se derrumbó en Palma de Mallorca provocando la muerte de cuatro personas, entre ellas dos alemanas y un senegalés, carecía de licencia para operar, informó este martes el alcalde de la ciudad en las turísticas islas Baleares.
De acuerdo con los informes legales , “la planta cubierta no dispone ni de licencia de actividad ni autorización para ocupar la terraza” del Medusa Beach Club, el local ubicado en la Playa de Palma, zona muy frecuentada por turistas extranjeros, indicó AFP por una rueda de prensa del alcalde de Palma de Mallorca, Jaime Martínez Llabrés.
“El informe de obras indica que no hay solicitud de ninguna licencia de obras en la zona del derrumbe”, explicó Martínez Llabrés, dando a entender que las reformas acometidas recientemente en la primera planta de este club tampoco habían contado con permiso.
Las probables causas del suceso fueron “un sobrepeso de las obras realizadas y la sobrecarga” de peso en la primera planta del local, en ese momento ocupada por unas 21 personas, detalló el alcalde de Palma de Mallorca, la capital de la isla del archipiélago balear.
La noche del jueves pasado, 23 de mayo, la primera planta del bar-restaurante se desplomó sobre la planta baja, lo que provocó que esta última también se hundiera sobre la subterránea, que fue donde los bomberos encontraron a las víctimas.
Los fallecidos son dos alemanas, un senegalés y una española que trabajaba en el establecimiento, según la policía.
El derrumbe dejó 16 heridos, de los cuales solo queda uno hospitalizado, agregó el alcalde.
Las islas Baleares, conocidas por sus aguas cristalinas y sus playas paradisíacas, son el segundo destino turístico de España después de Cataluña. En 2023 recibieron más de 14 millones de visitantes, según cifras oficiales.
*Con información de AFP