La vicepresidenta y candidata demócrata a las elecciones presidenciales de noviembre Kamala Harris condenó este martes las restrictivas leyes sobre el aborto en Estados Unidos, tras la publicación de un artículo del medio ProPublica sobre la muerte de una mujer por falta de atención médica.

Amber Thurman, de 28 años, murió en agosto de 2022 por complicaciones tras tomar la píldora abortiva para interrumpir un embarazo.

Kamala Harris durante el debate contra Donald Trump. | Foto: AFP or licensors

Se acababa de aprobar una ley que tipificaba este procedimiento, conocido como dilatación y legrado y destinado a vaciar el útero, como delito, salvo raras excepciones.

“Esta joven madre debería estar viva, criando a su hijo y persiguiendo su sueño” de estudiar enfermería, afirmó Harris en un comunicado.

Thurman, que ya tenía un hijo, tuvo que viajar a Carolina del Norte para abortar debido a que en Georgia no podía hacerlo luego de las seis semanas de embarazo.

Tras tomar la píldora abortiva (mifepristona y misoprostol) empezó a sangrar más de lo normal y fue al hospital.

Pero a pesar del rápido deterioro de su salud, el hospital esperó 17 horas antes de llevar a cabo el procedimiento de dilatación y legrado. Thurman murió durante la operación.

Un grupo de personas defiende el aborto durante una manifestación frente a la Corte Suprema de los Estados Unidos. | Foto: AFP or licensors

En 2022 la Corte Suprema, de mayoría conservadora, sobre todo desde el mandato de Donald Trump, dejó en manos de los estados la posibilidad de legislar localmente sobre el derecho al aborto, que se ha convertido en uno de los grandes temas de los comicios del 5 de noviembre.

“En más de 20 estados las prohibiciones del aborto de Trump impiden que los médicos presten atención médica básica”, denunció Harris. Y advierte que si el republicano, su rival en los comicios, “tiene la oportunidad, firmará una prohibición nacional del aborto”.

Estas prohibiciones devastadoras han “retrasado la atención rutinaria vital que necesitaba”, protestó Mini Timmaraju, de Reproductive Freedom for All, en un comunicado.

Los manifestantes sostienen carteles durante una manifestación del Día de la Madre en apoyo del derecho al aborto en la Corte Suprema de los Estados Unidos el 8 de mayo de 2022 en Washington, DC.

Según ProPublica, que consultó documentos confidenciales, es la primera muerte “evitable” relacionada con un aborto declarada oficialmente en Estados Unidos.

Según la comisión, había “muchas posibilidades” de que una intervención más rápida le hubiera salvado la vida. “Murió en el hospital rodeada de personal médico que podría haberle salvado la vida”, escribió en la red social X la escritora feminista Jessica Valenti. “Este es el resultado de las prohibiciones del aborto”.