Representantes de 48 países de mayoría musulmana miembros de la Organización por la Cooperación Islámica (OCI), se reúnen este miércoles en Estambul (Turquía) para intentar consensuar una reacción conjunta ante la decisión de Estados Unidos de reconocer Jerusalén como capital de Israel.
En el discurso de apertura del encuentro, el ministro de Exteriores turco, Mevlüt Çavusoglu, señaló que la cumbre mostrará la reacción del mundo musulmán ante los últimos acontecimientos.
"Trabajar por la unidad de los hermanos palestinos", así como "alentar a otros países a reconocer Palestina dentro de las fronteras anteriores a 1967 y con Jerusalén Oriental como su capital" son las prioridades de la reunión de hoy, señaló el ministro.
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Al menos 48 representantes de los 57 países miembros de la OCI participan en el encuentro de hoy, según señaló el canal de noticias NTV.
El presidente palestino Mahmoud Abas; el rey Abdulá de Jordania; el presidente de Azerbayán, Ilham Aliyev; el emir de Catar Tamim bin Hamid Al Sadi y el presidente iraní, Hassan Rohani, son algunos de los que asistirán a la cumbre.
También están en Estambul los ministros de exteriores de Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Marruecos y Kazajistán; así como el ministro de asuntos islámicos de Arabia Saudí.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, también ha anunciado su participación en la cumbre en su función de secretario general del Movimiento de Países No Alineados, un organismo observador de la OCI al que pertenece el país sudamericano.
Rusia también ha enviado a un representante como observador.
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La cumbre ha sido convocada por el presidente turco, el islamista Recep Tayyip Erdogan, tras la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer Jerusalén como capital de Israel y anunciar el futuro trasladado a esa ciudad de la Embajada de su país.
El mandatario turco aseguró recientemente que el Gobierno israelí ve el conflicto causado por el gesto estadounidense "como una oportunidad de incrementar la presión y violencia contra los palestinos" y adelantó que espera de la cumbre "un mensaje fuerte".