Aunque los efectos del cambio climático se han comenzado a sentir desde hace algunos años en diferentes partes del mundo, incluso, cada vez las cifra reflejan centenares de fallecidos por las olas de calor y los cambios extremos en la temperatura, entre otros, un nuevo estudio de la Organización de las Naciones Unidas reveló que un grupo de niños serían los más afectados por esta situación.
Según indicó el informe de la ONU, serán los niños de África lo que estarán excepcionalmente más vulnerables al cambio climático y “lamentablemente” ignorados por los responsables de financiar la lucha contra el calentamiento global.
África, un continente de 1.200 millones de habitantes, alberga algunos de los países menos responsables de las emisiones de carbono, pero que se ven afectados de forma desproporcionada por sequías, inundaciones, tormentas y olas de calor.
Los niños de 48 de los 49 países evaluados corren un riesgo “alto o extremadamente alto” de verse afectados por el cambio climático, según Unicef, la agencia de la ONU para la infancia, en un informe titulado Es hora de actuar.
“Los miembros más jóvenes de la sociedad africana son los más afectados por los duros efectos del cambio climático”, destaca Lieke van de Wiel, directora adjunta de Unicef para África oriental y meridional.
“Son los menos capacitados para hacer frente a la situación debido a su vulnerabilidad fisiológica, y a su escaso acceso a los servicios sociales esenciales. Además están desatendidos por los flujos clave de financiación climática necesarios para ayudarles a adaptarse, sobrevivir y responder a la crisis climática”, añade.
Los niños que viven en Nigeria, Guinea, Guinea Bissau, Chad, República Centroafricana y Somalia son los que corren mayor riesgo, según la organización. Una de las preocupaciones claves es su exposición a enfermedades.
La agencia de la ONU afirmó que menos del 3 % de la financiación mundial para hacer frente al cambio climático se destina a los niños, y pidió que se haga más, especialmente por parte del sector privado.
“Necesitamos una mayor orientación de la financiación hacia este grupo, para que estén preparados para afrontar toda una vida de trastornos inducidos por el clima”, afirmó van de Wiel.
El informe de Unicef se publicó días antes de la primera Cumbre Africana sobre el Clima, que se celebrará la próxima semana en Nairobi, capital de Kenia.
El objetivo de la conferencia es mostrar África como una fuente potencial de energía verde, en la primera de una serie de grandes reuniones previas a las negociaciones de la ONU.
Cómo se vería la Tierra si todo el hielo se derritiera
Las estimaciones indican que la costa Atlántica desaparecería en su totalidad, además de lugares icónicos como Florida y la Costa del Golfo, de acuerdo a lo reseñado por National Geographic. Mientras tanto, en la costa oeste de los Estados Unidos, las colinas de San Francisco se convertirían en un archipiélago y también el Valle Central se sumergiría bajo las aguas que lo transformarían en una inmensa bahía.
A su vez, el Golfo de California se expandiría hacia el norte, dejando así en el pasado a lugares como San Diego.
Por su parte, África perdería menos tierra en comparación con los otros continentes, pero no se escaparía de este trágico suceso. Con el aumento del calor global, grandes áreas podrían volverse inhóspitas y desafiantes para la supervivencia humana. Por ejemplo, ciudades históricas de Egipto como Alejandría y El Cairo quedarían debajo de las aguas del Mediterráneo.
En Europa también habría un escenario desolador, pues lugares emblemáticos como Londres y Venecia quedarían sumergidos. Naciones completas también sucumbirían ante el poder de estas aguas y por ejemplo, Países Bajos, un país que se caracteriza por sus sistemas de diques y barreras, quedaría inundados. Dinamarca, en un lapso de miles de años, también se perdería.
*Con información de AFP