La Policía de Zimbabue arrestó al líder de una secta apostólica y a siete miembros más de su iglesia luego de encontrar en una granja relacionada con ellos 16 tumbas y al menos 251 menores, que estaban siendo obligados a realizar trabajos forzados, de acuerdo con información entregada a medios de comunicación por las autoridades el pasado jueves 14 de marzo.
Uno de los portavoces de la Policía zimbabuense, Paul Nyathi, le dijo al portal EFE que los ocho detenidos se dieron tras una redada en la granja el pasado 12 de marzo, incluyendo al líder y autoproclamado profeta Ishmael Chokurongerwa, son señalados de diferentes delitos, entre ellos, abuso de menores.
Nyathi dijo a ese medio mencionado que “las investigaciones realizadas por la Policía establecieron que 246 de los 251 niños menores de 18 años encontrados en la granja no tenían certificados de nacimiento y estaban siendo utilizados para realizar diversas actividades físicas en beneficio de los líderes de la secta”.
“La Policía estableció que todos los menores en edad de ir al colegio no estaban recibiendo educación formal y eran sometidos a abuso, como (ser usados como) mano de obra barata, haciendo trabajos manuales bajo la excusa de aprender habilidades para la vida”, agregó.
Además, en la finca ubicada en la provincia de Mashonalandia Occidental (norte), se encontraron 16 tumbas, de las cuales nueve eran de adultos y las otras siete de niños.
Al respecto, el portavoz señaló: “Todos los entierros se llevaron a cabo sin registro previo en la oficina del Registro General en términos de la Ley de Registro de Nacimiento y Defunciones”.
Luego del rescate, los niños y las mujeres fueron llevados al hospital para determinar su estado de salud y si sufrieron abusos. “Nos están quitando por la fuerza a nuestros niños y mujeres. No sabemos a dónde los están llevando”, declaró uno de los fieles, sin identificarse.
Esta situación se dio mientras en los tribunales de Kenia se discute un caso similar, en el que, en abril de 2023, fue detenido el líder de una secta que persuadió al parecer a unas 430 personas para ayunar hasta morir y así encontrarse con Jesucristo.
En ese caso, el pastor Paul Mackenzie y otros 94 coacusados enfrentan cargos por terrorismo, asesinato de 191 niños y homicidio involuntario de al menos 238 personas.
Él es el presunto responsable del crimen conocido como ‘masacre de Shakahola’, en referencia al nombre del bosque donde las autoridades hallaron 430 cadáveres de sus seguidores en fosas comunes y tumbas. Aquí también hubo niños.
Y, a pesar de que ese líder de la secta ha estado privado de libertad convenció a sus seguidores de ayunar hasta morir, y las autopsias no solo mostraron los rastros de desnutrición, sino que algunos tenían signos de estrangulación y asfixia.