La semana pasada una noticia sorprendió al mundo después de conocerse que una anciana, de 76 años de edad, revivió en su propio velorio.
La muerte de Bella Montoya Castro fue declarada en el hospital de Babahoyo, en Ecuador. Como es costumbre, después del triste anuncio la familia se reunió para realizar el velorio y darle el último adiós.
En medio del velorio, mientras los familiares y amigos se despedían de la mujer se escucharon algunos golpes en el cajón, según narró el hijo de la mujer a varios medios de comunicación, y después de varios minutos se dieron cuenta que la anciana estaba nuevamente viva.
Según narró el hijo de la mujer, lo primero que hizo Bella fue tomar aire y su cuerpo se movió, los asistentes estaban completamente asombrados por el hecho y en medio de los gritos pedían que llamaran a una ambulancia para darle la debida atención.
Después de varios minutos, los paramédicos llegaron, la envolvieron en sábanas y la trasladaron a un hospital para atenderla. Según el Ministerio de Salud de Ecuador, la mujer había entrado la primera vez al hospital por un accidente cerebrovascular y tiempo después le informaron a los familiares que había fallecido por un paro cardiorrespiratorio.
Sin embargo, este sábado, 17 de junio, su hijo Gilberto Barbera Montoya confirmó la muerte de Bella Montoya Castro a The Associated Press, después de permanecer siete días en cuidados intensivos tras un primer diagnóstico fallido de muerte. Ahora, las autoridades pertinentes investigan el caso.
Como era de esperarse, el caso llamó la atención de los médicos del hospital donde estaba hospitalizada la anciana, pues allí le habían advertido al hijo que no se podía hacer mucho por salvarle la vida. Sin embargo, revivió, pero días después volvió a fallecer.
Barbera Montoya indicó que no ha recibido ningún informe de las autoridades sobre la auditoría médica de lo que pasó y advirtió que “esto no se va a quedar así”. Agregó que una hermana de la fallecida ya denunció el hecho formalmente, en busca de “que se señale cuál es el doctor que... la dio por muerta”.
La difunta, que era una enfermera jubilada, fue velada nuevamente el sábado en el mismo lugar donde se registró el suceso. Luego de una misa por la tarde, se realizaría su sepultura en un cementerio público, dijo su hijo.
¿Por qué se hace un velorio?
Los funerales se realizan cada vez que una persona fallece y se trata acto de conmemoración en el que se reconoce, celebra y honra la vida de un ser querido que murió por cualquier causa.
La mayoría de las veces, los funerales son muy tristes porque no se volverá a ver a esa persona amada, pero también es un acto en el que se reúnen las personas más cercanas para compartir el dolor y la pérdida de una persona.
También hay varios tipos de funerales, esto ya depende de las personas que lo estén realizando y lo que hubiese querido la persona fallecida. Existen los funerales tradicionales, velorios, servicios conmemorativos y celebraciones de vida.
Aunque suene un poco raro que existan varios tipos de funerales, el acto simbólico es el mismo de honrar a la persona que falleció en el que se hace algo que se adapte a los gustos y personalidad de la persona que se despide. Es un momento en el que los familiares y amigos puedan estar cómodos, quizás en uno de los momentos más difíciles de su vida.
¿Qué significan las velas en un velorio?
En los velorios se hace uso de 4 velas, las cuales representan las etapas de la vida de la persona fallecida que son la niñez, adolescencia, adultez y la vejez.
Este hecho se realiza para honrar la memoria de difunto, valorar su vida en todas sus etapas y recordar las acciones positivas que hizo en la tierra.