Una colombiana identificada como Sandra Zamudio murió en Malta luego de asistir a una fiesta en la que, al parecer, le suministraron escopolamina en una bebida. Según pudo establecerse, la joven fue trasladada a un hospital donde le diagnosticaron muerte cerebral.

“El sábado 2 de julio, nuestra hermosa Sami decidió salir de noche con su amado esposo a un bar local en Malta, donde viven desde hace un año. Desafortunadamente, ella se convirtió en un objetivo y víctima de drink spiking a manos de algunos extraños malvados”, dice una publicación de la página GoFundMe, en la que recaudan fondos para repatriar el cuerpo.

Claribel Torres, madre de la víctima, contó que “estamos devastados, no hay palabras. La vida nunca volverá a ser la misma sin ella. Sami era un apasionado de la vida. Ella era una cariñosa hija, hermana, esposa, tía, amiga y llena de vida”. Torres también contó que la joven llegó a Europa junto a su esposo hace más de un año en busca de un futuro mejor.

Lea además: OMS convocará al comité de emergencias por aumento de casos de viruela del mono

“Desafortunadamente su familia tuvo que tomar la desgarradora decisión de desconectarla de la máquina de soporte vital y donar sus órganos tal como Sami hubiera querido, salvando la vida de otras personas”, señala también la publicación de GoFundMe, donde la familia espera recaudar US$ 15.000 para la repatriación.

También se conoció que la familia de Zamudio busca que los órganos de la joven sean donados. Según medios locales, las autoridades de ese país ya iniciaron una investigación sobre el caso con el fin de determinar quiénes fueron los culpables de su deceso.