La Organización de las Naciones Unidas (ONU) le pidió al gobierno francés ocuparse seriamente de los “profundos” problemas de “racismo” que presenta en sus fuerzas de seguridad, esto tres días después de la muerte de un adolescente por un disparo de la policía.
“Es el momento de que el país aborde seriamente los profundos problemas de racismo y discriminación racial entre las fuerzas de seguridad”, declaró Ravina Shamdasani, portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, durante una conferencia de prensa periódica de la ONU en Ginebra.
En la jornada de este viernes, en lo que ha sido la tercer jornada de manifestaciones por parte de los ciudadanos franceses contra los policía, las fuerzas de seguridad francesas detuvieron a 667 personas, informó el Ministerio del Interior.
“Esta noche, nuestros policías, gendarmes y bomberos han hecho frente de nuevo, con valentía, a una violencia inusual. Siguiendo mis instrucciones de firmeza, practicaron 667 detenciones”, indicó en su cuenta de Twitter el ministro Gérald Darmanin.
Según el ministerio, 249 policías y gendarmes resultaron heridos, ninguno de ellos de gravedad.
Durante la noche del jueves y madrugada del viernes, grupos de manifestantes dañaron edificios públicos, saquearon tiendas y quemaron vehículos en numerosas ciudades de la periferia de París y en varias localidades de provincia.
La violencia estalló el martes en las afueras de París y se extendió a otras partes de Francia después de la muerte de Nahel, de 17 años, por un disparo a quemarropa de un agente en un control vial que quedó registrado en video.
El agente, de 38 años, fue puesto en prisión preventiva acusado de homicidio voluntario.
Anticipando otra noche turbulenta, el gobierno francés había desplegado el jueves 40.000 agentes en todo el país, 5.000 de ellos en París.
Ante la profunda crisis que se está viviendo en su país, el presidente Emmanuel Macron había convocado una reunión de crisis en París, la segunda en dos días. Antes de ese encuentro, la primera ministra, Élisabeth Borne, reunió en la mañana a los ministros de Interior, Justicia, Territorios y Ciudad, y denunció unos actos “insoportables e inexcusables”.
En París, varias tiendas del centro comercial Les Halles y en la turística y comercial calle Rivoli, que lleva al museo Louvre, fueron “vandalizadas”, “saqueadas” o “incendiadas” durante la noche, dijo un alto cargo policial.
Los participantes en las protestas también atacaron por segunda noche consecutiva comisarías, como en Pau (suroeste), ayuntamientos, como en Lille (norte), o escuelas, como en Amiens (norte).
En la barriada Pablo Picasso de Nanterre, donde vivía Nahel, la tercera noche de altercados dejó de nuevo vehículos incendiados, disparos de cohetes e incluso una sucursal bancaria incendiada, constató una periodista de la AFP.
Debido a la reunión de crisis, la decisión fue inmediata para el presidente Macron, debido a que tuvo que abandonar este viernes la cumbre de la Unión Europea en Bruselas antes del final de la cita. Macron canceló una conferencia de prensa prevista y dejó la cumbre para volver a París, sin hacer comentarios a la prensa a su salida.
Esto fue lo que ocurrió en Francia
El Gobierno francés llamó este miércoles 28 de junio “a la calma” después que la muerte de un joven por un disparo de la Policía provocara disturbios en un suburbio de París, lo que obligó a que fueran requeridos los servicios de más de 2.000 agentes para intentar retornar la convivencia en la capital francesa.
“Entendemos el deseo de respuesta y queremos que se den con total transparencia”, aseguró el vocero del Gobierno Olivier Véran, que no obstante lanzó “un llamado a la calma en esta situación tan particular y de una emoción muy fuerte”.
El drama, que relanzó la recurrente polémica sobre la violencia policial en Francia, ocurrió el martes por la mañana en Nanterre, en la periferia oeste de París, durante un control policial a un joven de 17 años que conducía un auto amarillo.
Un video que circuló en redes sociales muestra cómo uno de los dos agentes lo retiene a punta de pistola y le dispara a quemarropa cuando acelera. En la grabación se escucha: “vas a recibir una bala en la cabeza”, aunque no queda claro quién lo dice.
La fuga del joven terminó unas decenas de metros más allá, cuando el coche se estrelló contra un poste. La víctima, Naël M., falleció poco después tras haber sido alcanzado en el tórax.
“Nada, nada justifica la muerte de un joven”, dijo este miércoles desde Marsella el presidente centrista Emmanuel Macron, pidiendo que la “justicia” examine este hecho “inexcusable”.