El Gobierno de Venezuela denunció el lunes la "ocupación" de varias sedes diplomáticas en Estados Unidos, mientras el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado por más de medio centenar de países, aseguró que el presidente Nicolás Maduro está débil.

La Cancillería de Venezuela denunció que "sus sedes diplomáticas en Estados Unidos están siendo ocupadas de manera forzosa por parte de personas que cuentan con el respaldo público del Gobierno estadounidense y actúan como sus agentes".

La declaración se produjo después de que Carlos Vecchio, representante de Guaidó en Estados Unidos, anunciara la toma del control de la agregaduría militar de la nación caribeña en Washington, así como de otro edificio y del consulado en Nueva York.

Según Vecchio, estas medidas tienen la intención de asegurar los bienes y activos de Venezuela en Estados Unidos.

El Gobierno de Maduro replicó exigiendo a las autoridades estadounidenses "que cumplan con sus obligaciones de derecho y tomen las medidas necesarias para revertir de manera inmediata dicha ocupación forzosa de hecho, en cumplimento de lo previsto en (...) la Convención de Viena".

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La Cancillería también señaló en su comunicado que si el Gobierno estadounidense "persiste en el incumplimiento de sus obligaciones internacionales" y no protege estos edificios, Venezuela se reservará "decisiones y acciones legales y recíprocas correspondientes" en su territorio.

"Las sedes diplomáticas de Venezuela en Estados Unidos solo pueden ser utilizadas por los agentes diplomáticos oficiales que representan al gobierno democrático y constitucional del presidente Nicolás Maduro", se añade en el texto.

La oposición

Mientras tanto, Guaidó continuó este lunes tejiendo alianzas y mantuvo reuniones con representantes de sindicatos y de movimientos sociales en la sede del Parlamento, desde la que reiteró que continuará su gira para exponer sus razones a todos los venezolanos.

El opositor inició este recorrido por Venezuela el pasado fin de semana, en lo que ha llamado "operación libertad", que, según ha anunciado, llevará a los opositores a manifestarse a las puertas del palacio presidencial de Miraflores.

Varios sindicatos se comprometieron a acompañarlo en las próximas movilizaciones de calle, que por ahora no tienen fecha definida.

"Vamos en búsqueda de incorporar a todos los sindicatos, a los gremios (...) para que se incorporen en esta gran cruzada que vamos a acompañar a nuestro presidente encargado Juan Guaidó", dijo José Gregorio Caribe, coordinador en Caracas de la plataforma Frente Amplio (FAVL), que agrupa a opositores y disidentes del chavismo.

Guaidó no dio nuevos detalles sobre su gira para sumar simpatías, pero sí se refirió al anuncio del domingo de la reestructuración del gabinete ministerial que prepara Maduro, lo que consideró una muestra de debilidad.

"No hay gabinete, hay usurpación de funciones (...), lo que veo es un régimen muy débil, un régimen que no tiene respuestas, un régimen que no gobierna sino que canta victoria por tener un día más usurpando funciones", dijo Guaidó a periodistas al salir de las reuniones.

La vicepresidenta Delcy Rodríguez anunció el domingo a través de Twitter que Maduro ha pedido a todos los miembros del Gabinete que pongan sus cargos a la orden a fin de hacer una reestructuración profunda del gobierno y "blindar la patria".

Guaidó manifestó dudas acerca de la veracidad del anuncio de la vicepresidenta.

"Yo no sé si eso lo avaló o no Maduro (...), o si están jugando entre ellos un juego de poderes", indicó, al agregar "que ya muchos se fueron y no están aquí y por eso quieren sustituir algún elemento".

Maduro se mantiene en silencio sobre esta remodelación de gabinete, que se producirá después del masivo apagón que sumió en la oscuridad a casi toda Venezuela.

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