Tras su reciente comparecencia en un tribunal federal de Miami, donde fue acusado formalmente por manejo irregular de documentos clasificados, el expresidente Donald Trump hizo una parada sorpresa en el restaurante Versailles.

El lugar, en el sector de la Pequeña Habana, es un centro de encuentro habitual de la llamada diáspora cubana.

También es, por tradición, un sitio obligado de peregrinación durante la campaña para los candidatos presidenciales en la Capital del Sol, bien sean del Partido Demócrata o del Partido Republicano, lo cual es el caso de Trump.

En el restarante de comida cubana, a Trump le cantaron el Happy Birthday y oró con un pastor. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Así, el lugar ha visto llegar a Bill Clinton y George W. Bush, entre otros mandatarios.

En ese momento tan álgido de su carrera política, el millonario no quiso desaprovechar su presencia en la ciudad para darse un baño de popularidad entre sus copartidarios.

Por supuesto, ante la sorpresiva aparición, los comensales no tuvieron sino muestras de simpatía para con el expresidente, quien ese día no solo oyó 37 acusaciones en su contra, sino que se convirtió en el primer presidente en enfrentar cargos federales, siete en total, en la historia de Estados Unidos.

Los presentes en el lugar le cantaron el Happy Birthday, pues se acercaba el día.

También oró por iniciativa de un pastor que se encontraba allí, como lo informó el New York Post, que también relató que miembros de su equipo hicieron pedidos para llevar.

El restaurante Versailles es un sitio obligado para los candidatos presidenciales en el barrio Pequeña Habana de Miami. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Al ver la acogida ante su presencia, el magnate dijo “¡comida para todos!”.

En total, el paso del exmandatario por el lugar no alcanzó los diez minutos, de modo que no hubo tiempo para que sus admiradores ordenaran las “croquetas, pastelitos y cafecitos”, como señaló el Miami New Times, que le han dado fama al lugar entre la colonia de la isla.

Este diario registró, así mismo, una acusación anónima, de acuerdo con la cual él se fue sin pagar la cuenta.

Para que el asunto no tomara muchas alas, un vocero del magnate prefirió dar explicaciones al Post.

“El presidente Trump estaba muy entusiasmado y agradecido con la familia del restaurante Versailles por darle la bienvenida esta semana. Al final de la visita, el presidente ofreció comprar comida para el grupo de asistentes dentro del restaurante, pero cuando salió de allí, los asistentes lo siguieron afuera y no pidieron nada”, señalo el portavoz.

Con el ánimo de que no quedaran dudas, el representante de la campaña trumpista aclaró: “Los miembros del equipo pagaron las comidas que pidieron para llevar y no quedaron cuentas pendientes. ¡El presidente Trump espera regresar pronto!”.

El presidente llegó al restaurante tras su comparecencia en un tribunal federal de Miami, donde fue acusado formalmente por el supuesto manejo irregular de documentos clasificados del gobierno. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All Rights Reserved.

Si a los miembros de la campaña de Trump no les gustó el comentario sobre que quiso hacer ‘conejo’, al dueño del lugar seguro le quedó un sabor agridulce, pues dejó de percibir unas buenas entradas, reflexionaron algunos comentaristas, aunque otros les replicaron que ese el precio de regentar un sitio que es un verdadero hito de la política en Miami.

En cuanto a Trump, no es la primera vez que es acusado de no ser el más justo en asuntos de juego y facturas.

En el mundo del golf, hay incontables historias de todas las artimañas a que es capaz de acudir si ve que va perdiendo.

También es conocido por no mantener muy al día la columna del ‘debe’ en sus libros de contabilidad.

Según The Independent, él “tiene un largo historial de estafar a las personas que trabajan para él”. Y cita dos casos.

Primero, las cientos de personas, desde lavaplatos hasta abogados que formaron parte del equipo de la campaña presidencial de 2016 a quienes se negó a pagarles todo lo que les debía.

En segundo lugar, el diario inglés aseguró que Truth Social, la red que creó cuando Twitter le canceló su cuenta, está en pleito con su servidor web, que lo acusa de adeudarles varias facturas atrasadas.