Las fuerzas de seguridad de Francia detuvieron a 16 personas entre la noche del martes y la madrugada del miércoles, el menor balance desde el estallido de violencia tras la muerte hace ocho días de un joven baleado por la policía, según un balance oficial.

El ministerio del Interior indicó este miércoles, que se detuvo a 16 personas, siete de ellas en París y sus suburbios, se dañaron ocho edificios, se incendiaron 78 vehículos, y se provocaron 116 fuegos en las calles.

Las autoridades desplegaron unos 45.000 policías para evitar nuevos altercados. Ningún agente resultó herido y tampoco se atacaron locales de la policía ni de la gendarmería, precisó el ministerio.

El último balance confirma la desescalada en esta crisis, que relanzó el debate sobre la violencia policial y puso de relieve, con el ataque a la casa de un alcalde, la creciente violencia que enfrentan los cargos públicos.

No está claro si el fallecido participaba en las protestas o si únicamente pasaba por allí. El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el martes una ley urgente para acelerar las reparaciones de miles de comercios y edificios dañados, durante una reunión con alcaldes para estudiar soluciones a la crisis.

La derecha y la ultraderecha piden mano dura contra los autores de los disturbios, pero la izquierda apunta al polémico papel de la policía en los suburbios y la situación en estos barrios, entre los más pobres de Francia.

Las protestas en Francia se dan luego del asesinato de Nahel, un adolescente asesinado por un policía después de que se negara a detenerse para un control de tráfico en la ciudad de Nanterre. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved.

Macron anuncia una ley urgente para reparar los daños de los disturbios

El mandatario centrista afirmó al recibir a los ediles que era “prudente” sobre el riesgo de un repunte de la violencia, aunque consideró que “el pico que hemos visto en los últimos días ya ha pasado”.

El encuentro se produjo cuando parece confirmarse una desescalada. En la noche del lunes, hubo 24 edificios dañados y 159 autos incendiados. Las fuerzas de seguridad detuvieron a 72 personas y no hubo ningún agente herido.

Desde la muerte del joven, comisarías, escuelas y ayuntamientos fueron incendiados, se saquearon tiendas y se lanzaron cohetes contra las fuerzas de seguridad. El drama volvió a poner en primer plano el recurrente debate sobre la violencia policial en Francia.

Y el ataque con un coche durante el fin de semana contra el domicilio del alcalde de Haÿ-les-Roses (al sur de París), el derechista Vincent Jeanbrun, también puso de relieve la creciente violencia que enfrentan los representantes públicos.

Emmanuel Macron anunció este martes ante más de 300 alcaldes una ley urgente para acelerar las reparaciones de miles de comercios afectados por las protestas. | Foto: AFP

Expertos dicen que hay una “respuesta represiva” por parte del Estado

“Si la solución a todos los conflictos sociales es una respuesta represiva del Estado para restablecer el orden, con mucha probabilidad la violencia continuará aumentando”, dijo a AFP el sociólogo Denis Merklen, especialista en las protestas en los suburbios.

En una semana de disturbios, hubo 3.486 personas detenidas y 808 miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos, según el Ministerio del Interior.

Además, 5.892 vehículos fueron incendiados y 1.105 edificios y 269 comisarías dañados, indicó la misma fuente.

En Marsella, en el sur, la fiscalía anunció que abrió una investigación por la muerte de un hombre de 27 años el sábado por la noche, al sospechar que pudo ser víctima de un paro cardiaco tras ser alcanzado en el pecho por una pelota de goma, conocida como “flashball”, un proyectil que suele utilizar la policía francesa.

En una semana de disturbios, hubo 3.486 personas detenidas y 808 miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos, según el Ministerio del Interior de Francia. | Foto: AFP

*Con información de AFP