Un aproximado de cuatro menores de edad muertos y nueve heridos, fue el resultado de un voraz incendio en la ciudad de Vigo, noreste de España.

Según indicaron los servicios de emergencia de esta ciudad a través de su red social X, “cuatro personas perdieron la vida, todas ellas menores de edad” y los heridos fueron trasladados a diferentes centros hospitalarios.

A pesar de ser llevado a un centro médico, el bebé murió tras recibir la droga. | Foto: Catharina van den Dikkenberg

Hasta el momento se desconocen las causas de este incendio que ocurrió sobre las 4:00 a.m. en un edificio en el barrio de As Travesas, cerca del centro de la ciudad gallega.

De acuerdo a la prensa local, los bomberos lograron apagar el incendio tres horas después y uno de ellos resultó afectado tras inhalar humo durante la operación.

Las fotografías de los medios locales mostraban a los residentes en estado de shock a primera hora de la mañana del miércoles en los alrededores del edificio, cuya planta baja fue devastada por las llamas, que también alcanzaron algunas ventanas de los pisos superiores.

Adicionalmente, un equipo de psicólogos especializados en situaciones de emergencia, se desplazó al lugar de los hechos para ayudar a los familiares de las víctimas.

Cabe destacar que este suceso se produjo a pocos días de un incendio que acabó con una discoteca latina en la ciudad de Murcia, sureste de España, que dejó trece muertos, entre ellos colombianos, nicaragüenses, ecuatorianos y españoles.

Esta tragedia conmocionó al país ya que se conoció que la discoteca tenía una orden de cierre por falta de licencia vigente desde hacía un año, que no fue ejecutada por las autoridades locales.

Al respecto, Juan Esteban Ramírez, propietario del lugar, habló en Blu Radio sobre el hecho e indicó que las cosas no son como se están diciendo.

“Es imposible. Nunca me notificaron, es ilógico que las autoridades pertinentes permitan que un local que supuestamente no tiene licencia pueda seguir ejerciendo un año y medio”, recalcó Ramírez.

“Todo fue tan rápido. La discoteca tenía dos pisos, cuando me di cuenta, comencé a evacuar a la gente y corté la música. Ayudé a salir a personas que estaban en pánico, fui hasta la puerta y volví a entrar. En ese momento, me encontraba en la parte de abajo, cuando se fue la energía y no tenía visibilidad, tomé la decisión de volver a salir y me tropecé con diferentes cosas. Si estaba 30 segundos más, era imposible”, indicó Ramírez.

Familiares de los muertos provocados por el incendio en una discoteca de Murcia, España, esperan tener más información de sus seres queridos | Foto: Con derechos gestionados de Getty Images

¿Quién era la latinoamericana que se despidió de su madre en un audio durante un incendio de discoteca en España?

Desgarrador fue el último mensaje que Leidy Paola Correa tuvo con su familia, antes de morir calcinada en un incendio de una discoteca en Murcia, España, en la cual había más de 100 personas departiendo durante el pasado primero de octubre.

“Mami, la amo, vamos a morir”, se logró escuchar en un audio que la joven envió a su madre en la mañana del primero de octubre, el cual se conoció recientemente y fue difundido por los medios de comunicación de España.

En este audio también se podía escuchar al fondo muchos gritos de personas que estaban lógicamente alterados por el hecho, e incluso se podía oír a los asistentes de la discoteca pidiendo que se encendieran las luces.

El padre de la joven reveló detalles de los últimos momentos con vida de su hija. | Foto: El País

Los padres de la mujer actualmente lamentan la muerte de su hija, y concretamente el padre manifestó ante los medios de comunicación del exterior que, debido al tono de voz de su hija, “se notaba claramente que eran los últimos segundos que tenía de vida”.

Luego de haber conocido este audio, los familiares indicaron que trataron de ponerse en contacto con su hija, pero no fue posible hacerlo; luego se enteraron por los medios de comunicación del lamentable incendio que tuvo lugar en la discoteca a la que iba a asistir la mujer.