En la tarde de este miércoles 26 de junio se presentó un conato de golpe de estado en Bolivia, liderado por quien era entonces, el comandante general del Ejército, Juan José Zúñiga, quien llegó con cientos de efectivos militares hasta la Plaza de Murillo, en inmediaciones del palacio de gobierno.
Zúñiga hizo una serie de declaraciones luego de ordenar que las tanquetas del Ejército derribaran la puerta del palacio de gobierno, en busca de usurpar el poder.
Tras ingresar al recinto y encarar al presidente Luis Arce, Zúñiga declaró que esta sublevación tenía como objetivo, según él, “recuperar la democracia”, además de exigir la liberación de opositores presos y detenidos políticos.
“Las Fuerzas Armadas pretenden reestructurar la democracia, que sea una verdadera democracia. No de unos cuantos, no de unos dueños que ya tienen 30, 40 años manejando el país”, dijo el destituido comandante del ejército en las afueras de la sede presidencial, rodeado de soldados y unas ocho tanquetas militares.
Cabe recordar que Zúñiga fue el protagonista de un tenso momento político en Bolivia desde el lunes, cuando amenazó al expresidente Evo Morales y dijo que se iba a tomar el control de la sede presidencial, si el exmandatario se postulaba a las elecciones presidenciales nuevamente.
Un militar con pasado ‘turbio’
De acuerdo con la información publicada por el periódico boliviano Los Tiempos, el militar se vio involucrado en el supuesto desvío irregular de 2,7 millones de pesos bolivianos destinados al pago de bonos sociales. Por lo anterior, el militar solo habría cumplido con una sanción de 7 días de arresto.
Además, el tabloide asegura que Zúñiga es conocido por codearse con altas figuras políticas de la derecha y ha sido visto en algunos actos sociales de la alta sociedad.
Zúñiga había amenazado con tomarse el poder
Cumpliendo con lo dicho, Zúñiga le ordenó a militares que marcharan hasta la capital del país a usurpar en el palacio de gobierno. Sin embargo, su cometido no se dio y el Presidente Luis Arce, nombró una nueva cúpula militar que logró dar con la captura del golpista.
Zúñiga fue capturado y conducido a un vehículo policial en las afueras de un cuartel militar. “¡Está detenido mi general!”, señaló el viceministro de Gobierno (Interior), Jhonny Aguilera, según imágenes de la televisión estatal.