La Organización Transparencia Internacional emitió el informe 2023 que evidencia que la mayoría de los países lograron mínimos o nulos avances en combatir la corrupción en el sector público. Por doce años consecutivos, el promedio global del IPC se mantiene sin variaciones en 43 puntos, y más de dos tercios de los países obtienen una puntuación inferior a 50, por lo que afrontan graves problemas de corrupción.
En el caso de América Latina, el país con peor índice de corrupción es Venezuela, que ocupa el puesto 177 entre 180 naciones. Le siguen Nicaragua y Haití, en el lugar 172. Y el desalentador ‘top’ 5 lo cierran Honduras y Guatemala, que comparten el puesto 154.
Venezuela representa un “ejemplo de gran corrupción”, pues por décimo año consecutivo es el país más corrupto de las Américas. La organización reseñó que en Venezuela “miles de millones de dólares de dinero público han sido malversados sistemáticamente, beneficiando a unos pocos individuos poderosos y exacerbando la pobreza y la desigualdad”.
“Los grandes esquemas de corrupción van de la mano con la captura de los sistemas legislativo, regulatorio y judicial por parte de funcionarios de alto nivel para generar poder y evadir el castigo”, detalla Transparencia.
Por otro lado, la organización advierte que el declive que registra Guatemala es el resultado de tres gobiernos consecutivos implicados en prácticas corruptas. El Ministerio Público y el poder judicial se han utilizado para conceder impunidad a las clases dirigentes por sus prácticas corruptas y para atacar a quienes alzan la voz contra la corrupción.
¿Cómo le fue a Colombia?
Colombia tuvo una leve mejoría en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) al pasar del puesto 91 al 87, en un ranking que mide a 180 países. Así lo reveló el más reciente informe de Transparencia por Colombia, organización que pertenece a Transparencia Internacional y que presentó los resultados correspondientes a 2023.
Uno de los principales hallazgos mostró que Colombia recibió una calificación de 40 puntos sobre 100, “un punto por encima de su calificación en 2022″, lo cual reflejó una leve mejoría, puesto que esta medición otorga puntajes entre 0 y 100 a 180 países, “donde 100 indica que un país se percibe como muy transparente, mientras que 0 muestra que es percibido como muy corrupto”.
De manera que toda calificación por debajo de 50 puntos significa que el país enfrenta serios problemas de corrupción. “A pesar de que el nuevo puntaje no implica un cambio estadístico significativo, si se compara con las puntuaciones de 39 sobre 100 de los cinco años anteriores y de 36 sobre 100 desde el 2012, por primera vez habría expectativa de una tendencia de mejora en el índice. No obstante, cumplir con esa expectativa implica avanzar de manera más decidida en la lucha contra la corrupción en el país”, resaltó el informe.
Otro de los datos a resaltar es que Colombia ocupó el puesto 87 entre 180 países ascendiendo cuatro posiciones en comparación con el año inmediatamente anterior, es decir 2022. Cabe recordar que esta posición la había ocupado en 2021.