Creer en acontecimientos espirituales suele ser un punto de debate entre las personas, pues muchas consideran que esto no es cierto; sin embargo, algunas veces llegan pruebas irrefutables, como lo que sucedió a la madrugada de este Miércoles Santo cuando un guardia de seguridad se encontraba de turno en un centro comercial y de la nada varios dispositivos Alexa comenzaron a recitar oraciones católicas.
El video en el que se muestra a los dispositivos repetir la ‘Corona a la Divina Misericordia’ se ha hecho viral en redes sociales, en especial en TikTok. Este incidente ocurrió durante la madrugada del Miércoles Santo en el Palacio de Hierro, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Hasta el momento, no se ha encontrado una explicación para lo sucedido.
Lo que si ha dejado es una lista de opiniones divididas en redes sociales, pues muchos han aprovechado para generar reflexiones sobre la interacción entre la tecnología y la espiritualidad. Algunos consideran este evento como una simple coincidencia, mientras que otros lo interpretan como un recordatorio de la presencia divina en todos los aspectos de la vida, incluso en la era digital.
La “Corona a la Divina Misericordia” es una oración católica que recuerda los sufrimientos y la muerte de Jesucristo y expresa el agradecimiento por salvación, en el que creen los feligreses.
“A las almas que recen esta corona, mi misericordia las envolverá en vida y especialmente a la hora de la muerte. A través de ella obtendrás todo, si lo que pides está de acuerdo con mi voluntad.
Padre eterno, te ofrezco el cuerpo y la sangre, el alma y la divinidad de tu amadísimo hijo, nuestro Señor Jesucristo, en expiación de nuestros pecados y los del mundo entero.
Por su dolorosa pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero. Por su dolorosa pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero. Por su dolorosa pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero”.
Para terminar se dice tres veces:
“Santo Dios, santo fuerte, santo inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero”.