El ministerio de Defensa afgano, por otra parte, informó este lunes de la muerte de cuatro soldados afganos en dos ataques talibanes en las últimas 24 horas en las provincias de Farah, al oeste, y de Kabul, al este.
Varios enfrentamientos armados entre talibanes y fuerzas gubernamentales y extranjeras en Afganistán han dejado en las últimas horas a 36 personas muertas, la mayoría de ellas presuntos talibanes, según informaron este lunes fuentes oficiales.Entre las víctimas mortales figuran cuatro miembros de la misión de la Otan, la Fuerza de Asistencia a la Seguridad en Afganistan (ISAF), se informó en un comunicado que no precisa la nacionalidad de los muertos, según el protocolo habitual en estos casos.En el comunicado solo se afirma que murieron a causa de la explosión de una mina "en el este de Afganistán", sin proporcionar más detalles del ataque.La mayor parte de los incidentes tuvieron lugar en esa región, una de las zonas donde la actividad de los insurgentes, que han desatado una ofensiva por todo el territorio afgano, es más intensa.En la provincia nororiental de Laghman, cuatro personas resultaron muertas y catorce heridas cuando un suicida hizo explotar a mediodía su carga en un concurrido restaurante en el mercado del distrito de Ali Shing, informó el portavoz del gobierno provincial, Faizullah Pathan."Los muertos eran ancianos líderes tribales y los heridos civiles que estaban almorzando en el restaurante", explicó Pathan.Según la versión talibán, dada por el portavoz insurgente Zabiulá Muyahid, los muertos eran comandantes de las milicias progubernamentales y los heridos, sus guardaespaldas.Un número no especificado de insurgentes atacaron a los trabajadores de la obra y se desencadenó un tiroteo entre los talibanes y los guardas de la compañía constructora, que dejó como resultado a un trabajador y seis atacantes muertos.Los grupos insurgentes tienen como objetivo prioritario el control de los principales ejes viarios del país para nutrir sus arcas mediante la extorsión a las compañías constructoras y, a la vez, para interferir en el transporte de tropas y mercancÍas del gobierno y las tropas internacionales.La agencia afgana AIP informó hoy también de dos choques armados en las provincias norteñas de Jawzjan y Sar-i-Pul que acabaron con la vida de al menos una decena de presuntos insurgentes.La ofensiva que los talibanes han puesto en marcha desde el primero de mayo y que denominan "Badar" ha provocado ya centenares de víctimas, muchas de ellas civiles, y no para de aumentar la presión sobre las fuerzas afganas e internacionales apenas dos meses antes de que empiece la retirada gradual de las tropas de EEUU.