El portaaviones chino Liaoning llegó este viernes a Hong Kong haciendo historia al tratarse del primer navío de esta envergadura del gigante asiático que llega a aguas de la ciudad, dentro de las celebraciones por el 20 aniversario de su retorno a la soberanía de Pekín.
Escoltado por un grupo de combate de dos destructores y una fragata, y con un escuadrón de cazas, helicópteros y una tripulación de 2.000 personas a bordo, el gigantesco buque de 60.900 toneladas hizo entrada a las 7:00 de la noche en aguas hongkonesas.
Se trata de la primera vez que una nave de esta envergadura llega a Hong Kong donde, y también por primera vez en su historia, podrá ser visitado por un limitado grupo de 2.000 ciudadanos a lo largo del fin de semana.
La llegada de la embarcación a la ciudad es vista como una muestra de exhibición soberana y de integración territorial por parte del Gobierno chino, especialmente en Hong Kong donde las voces a favor de más autonomía e incluso de independencia volvieron a resonar a lo largo del pasado fin de semana durante la primera visita oficial del presidente chino, Xi Jinping.