Un obispo de una iglesia de Detroit (Michigan, EE.UU.), Charles H. Ellis III, rozó el pecho de la cantante Ariana Grande al rodearla con su brazo durante el funeral de Aretha Franklin, un acto que ha causado mucho revuelo en Estados Unidos.
Durante la honra póstuma, celebrada este viernes, Ellis llamó a Ariana Grande para que dedicara unas palabras a la "Reina del Soul" desde el altar en el que él estaba situado y ahí rodeó a la cantante con su brazo derecho.
En el vídeo en el que aparece este momento, se puede apreciar cómo el pastor colocó su mano muy por encima de la cintura de la cantante, a la altura del pecho, y deliberadamente trató de rozar el pecho de Ariana Grande mientras bromeaba con ella.
Este episodio ha desatado la polémica en las redes sociales, especialmente en Twitter, donde la etiqueta #RespectAriana fue tendencia durante horas.
El comediante Trevor Noah, de amplia popularidad en Estados Unidos, fue uno de los primeros en denunciar la actitud del obispo Ellis hacia la cantante en su cuenta oficial de Twitter.
"¿Qué pasa con la mano del pastor?", se preguntó Noah en su tuit, en el que adjuntó un vídeo en el que se ve cómo la mano de Ellis se acerca al pecho de la joven cantante en repetidas ocasiones.
Lea también: 'Fans y celebridades lamentan la muerte de Aretha Franklin'.
Tras las críticas, el pastor Ellis se disculpó y dijo que no fue su intención tocar el pecho de la artista.
"Nunca sería mi intención tocar el pecho de ninguna mujer... No sé, supongo que la rodeé con el brazo", dijo en comentarios a los medios de comunicación estadounidenses.
"Quizás crucé la frontera, tal vez fui demasiado amigable o familiar, pero nuevamente, me disculpo", señaló.
Ariana Grande fue una de las numerosas personalidades que quisieron dar el último adiós a Aretha Franklin, un icono de la música en Estados Unidos.
Nacida en 1942 en Memphis (Tennessee, EE.UU.), pero criada en Detroit, donde su familia se mudó cuando tenía cuatro años, la artista se ganó el título de "Reina del Soul" tras la aparición en 1967 de "Respect", que se convirtió en un himno de la lucha por la igualdad de la población negra y, en particular, de las mujeres.
Franklin falleció el pasado 16 de agosto en su casa de Detroit víctima de un cáncer de páncreas que había mantenido con suma discreción.