El rey Carlos III, que se someterá a un tratamiento por un problema “benigno” de próstata, y la princesa Kate Middleton, esposa del príncipe heredero Guillermo, que superó “con éxito” una operación abdominal, se vieron obligados a posponer sus compromisos, según anunciaron el miércoles en comunicados oficiales.
“Como miles de hombres cada año, el rey pasó una consulta por agrandamiento de la próstata. Lo que sufre Su Majestad es benigno y acudirá al hospital para un procedimiento correctivo”, informó el Palacio de Buckingham.
“Los compromisos públicos del rey se pospondrán durante un breve período de recuperación”, precisó el texto.
Este comunicado constituye el primer anuncio público del Palacio de Buckingham sobre la salud del soberano, de 75 años, desde su ascenso al trono el 8 de septiembre de 2022, tras la muerte de su madre, la reina Isabel II.
La hiperplasia o hipertrofia benigna de próstata se diagnostica cuando existe un crecimiento benigno de la glándula prostática en el varón. Esta hipertrofia o agrandamiento de la próstata provoca síntomas urinarios en el varón adulto y es un proceso que se correlaciona con la edad del paciente.
Cargada agenda del rey
El monarca ha tenido una agenda muy cargada desde su ascenso al trono, asistiendo a actos de asociaciones benéficas, o a nivel diplomático viajando a Alemania, Francia, Kenia o a la conferencia climática COP28, además de recibir a jefes de Estado extranjeros.
El anuncio de los problemas de próstata del rey Carlos III llegó poco más de una hora después de que se informara que la princesa de Gales fue hospitalizada el martes para someterse a una intervención quirúrgica abdominal “programada”, que se realizó con “éxito”.
La princesa, de 42 años, fue ingresada en la London Clinic de la capital británica y, según el comunicado oficial, “se espera que permanezca en el hospital entre diez y catorce días, antes de volver a casa para continuar con su recuperación”.
“Siguiendo los consejos de los médicos, es poco probable que regrese a sus funciones públicas antes de Semana Santa”, que termina el 31 de marzo, según el texto.
La princesa de Gales, muy popular en la opinión pública británica, “quiere pedir disculpas por el hecho de tener que posponer sus próximos compromisos. Espera reintegrarse a tantos como pueda, lo antes posible”, prosigue.
El comunicado añade que en adelante solo se publicarán partes oficiales sobre la evolución del estado de la Princesa de Gales, anteriormente conocida como Kate Middleton, “cuando haya nueva información significativa”.
La princesa de Gales, nuera del rey Carlos III, “espera que el público comprenda su deseo de mantener la mayor normalidad posible para sus hijos y de que su información médica personal permanezca privada”, concluye el texto.
Popularidad de la Princesa de Gales
El comunicado oficial sobre el ingreso de la princesa de Gales en el hospital no ofrece detalles sobre los motivos, pero según varios medios británicos, la princesa, cuya última aparición pública se remonta a Navidad, no padece cáncer.
Según el diario The Times, su marido Guillermo también ha renunciado a varios de sus compromisos públicos para “permanecer a su lado tanto como sea posible”. El Príncipe de Gales podría de este modo cancelar una visita a Roma.
La pareja, que tiene tres hijos, Jorge, Carlota y Luis, reside en una propiedad privada en Windsor, al oeste de Londres.
En las últimas encuestas, Kate Middleton ocupó el tercer lugar de popularidad entre los miembros de la realeza vivos, con un índice de aprobación pública del 63%, detrás de su esposo Guillermo (68%) y de la hermana del rey Carlos III, la princesa Ana (67%).
La reina Isabel II, que murió en septiembre de 2022 a los 96 años, sigue siendo la más popular, con un 75% de aprobación.