Los cinco pasajeros a bordo del sumergible perdido el domingo cuando efectuaban un viaje turístico al pecio del Titanic en el Atlántico Norte perdieron la vida al implosionar la nave, según los restos encontrados hallados por los equipos de rescate.
Aunque los rescatistas conservaban la esperanza de encontrarlos con vida, después de una intensa búsqueda en la que participaron equipos de diferentes países, este jueves 22 de junio, finalmente se confirmó la lamentable noticia.
Poco antes de que se confirmara el hallazgo de los restos del sumergible, el youtuber mexicano Alan Estrada compartió su experiencia a bordo del submarino Titán en el año 2021 para ver los restos del Titanic. El creador de contenido relató que para el viaje en la nave se aplicó un protocolo, según el cual, si se pierde comunicación con la central por cierto tiempo, la tripulación debe abortar la misión.
De igual manera, reveló que antes de abordar, los tripulantes conocen los riesgos que existen, entre ellos perder la vida durante el descenso en las profundas aguas del mar. “Honestamente, como participante sabía a los riesgos a los que me exponía”.
“Es el primero que puede llevar a cinco pasajeros, no hay asientos, te acomodas, hay una repartición, no te puedes parar, el sumergible no tiene esas dimensiones”, detalló sobre el pequeño submarino. También habló sobre su funcionamiento y dijo que “tiene un sistema (de lastres) que los arroja para que el mismo sumergible por flotación llegue a la superficie, en el caso de que haya perdido comunicación”.
Los detalles del fatal hallazgo
Los cinco pasajeros a bordo del sumergible perdido el domingo, cuando efectuaban un viaje turístico al pecio del Titanic en el Atlántico Norte, perdieron la vida al implosionar la nave, según los restos encontrados por los equipos de rescate.
“Los restos son consistentes con una catastrófica pérdida de presión de la cámara” del Titán, cuya comunicación se perdió el domingo, menos de dos horas después de haber iniciado la inmersión turística con cinco personas a bordo hacia los restos del Titanic en el Atlántico Norte, anunció el contraalmirante del servicio de Guardacostas estadounidense John Mauger, que transmitió el pésame a las familias.
A bordo viajaban el millonario británico Hamish Harding, presidente de la compañía Action Aviation; el paquistaní Shahzada Dawood, vicepresidente de Engro, y su hijo Suleman -ambos también con nacionalidad británica-; el experto buceador francés Paul-Henri Nargeolet, y Stockton Rush, director general de Ocean Gate Expeditions, la compañía que fabricó y operaba el sumergible, y que cobraba 250.000 dólares por turista.
En la mañana de este jueves, un ROV, un vehículo de control remoto, encontró “un campo de restos” esparcidos a menos de medio kilómetro del Titanic, a casi 4.000 metros de profundidad y a 600 kms de tierra firme, entre ellos la cola del sumergible, explicó Mauger en una conferencia de prensa.
A ellos se suman otras cuatro grandes piezas que confirman la “implosión catastrófica” del sumergible, de 6,5 metros de eslora, pese a que ninguna de las boyas sonares presentes en el agua casi de manera constante había detectado nada especial, según los guardacostas estadounidenses.
Los rescatistas se mantenían confiados hasta esta misma mañana de que podrían hallar a los pasajeros con vida, pese a que se habían agotado las 96 horas de oxígeno de emergencia de que disponía el sumergible.
“Existen muchos interrogantes sobre cómo, por qué y cuándo ocurrió” el accidente del sumergible, dijo Mauger, que señaló que las investigaciones prosiguen.
En un tiempo récord, los rescatistas pusieron en pie una “compleja” operación en la que participaron barcos y aviones de varios países, entre ellos Canadá, Estados Unidos, Francia, así como de empresas privadas, y vehículos de control remoto (ROV, por sus siglas en inglés).
Otro robot de la empresa de cartografía en aguas profundas Magellan esperaba llegar desde Gran Bretaña en la tarde de este jueves para sumarse al peinado de los fondos marinos.
*Con información de AFP.