En una reunión histórica en el Icesi la revista Semana realizó un evento para visibilizar los retos y logros de las administraciones de Dilian Francisca Toro y Alejandro Eder. Más que un foro informativo demostró la nueva forma de hacer periodismo en un mundo donde la inmediatez no da tiempo para análisis profundos, ni preguntas recargadas. Pareciera que la prensa amarillista de lograr la última chiva, o la más escandalosa no es la moda del momento.
Interesantes las opiniones de los participantes, incluyendo no solo algunos funcionarios de la Administración, sino también a personajes claves como el Rector del Icesi, Esteban Piedrahita, quién admitió que él no era empresario, y que es una falacia educar para el emprendimiento, sino más bien para la empleabilidad. Como siempre en los foros que empiezan a la madrugada, a las 11 de la mañana la gente comienza a bostezar, no por aburrimiento, sino por la falta de sueño. Esta vez hubo espectáculo de salsa y nada menos que los campeones mundiales.
Lo más innovador fue la entrevista de Vicky Dávila al alcalde Alejandro Eder. No hubo intento de corcharlo, él contó la conmovedora historia de su infancia y por qué después de que casi muere en la caída de las torres gemelas en Nueva York decidió regresar a Colombia para servirle a Cali, promesa que le hiciera a su mamá, nuestra querida feminista y autora de varios libros de género, Elenita Garcés cuando tenía doce años. Como postre se apareció un icónico cantante del grupo Niche y terminaron tanto Vicky como Alejandro dándonos otro show de salsa, esta vez protagonizado por el alcalde y la directora de la Revista Semana.
Tanto en la entrevista con la gobernadora como con el alcalde, a diferencia de la opinión de los mandatarios de Antioquia no hubo forma de que criticaran o se quejaran del Gobierno del Cambio, uno de los caballitos de batalla de la Revista Semana. Alejandro ante las preguntas reiteradas de su relación con el presidente Gustavo Petro dijo que, a diferencia de otras ciudades capitales, en Cali en las encuestas el 50% de los habitantes decían apoyar a Petro y si bien él no era amigo personal del presidente, los ministros lo atendían y no tenía queja del gobierno central. Ambos estuvieron de acuerdo que el mayor reto era la seguridad, pero las cifras fueron alentadoras, varios batallones de alta montaña, el desmantelamiento de la enorme mina ilegal de los Farallones y la llegada de más pie de fuerza. Tanto la gobernadora como el alcalde dijeron recibir apoyo del ministro de Defensa, así como del General Salamanca de la Policía y que el COP16 es el más importante evento que se ha dado en la historia de Colombia. Ninguno de los dos quiere pelear con la cuchara, además son personas de paz y Alejandro Eder, creyente y devoto de San Antonio ha logrado reconciliar a Cali, así algunos de sus votantes lo critiquen.