Se la identifica (¿o identificaba?) con el calificativo de ‘madre’ para recalcar su importancia, destacando el sentido de pertenencia, reconocimiento, afecto, valoración y respeto que se debía sentir. Parece que también este es un concepto que evoluciona.
Un reciente viaje a Santa Marta mostró la total indiferencia por el sentido de patria de parte de ese lugar. Ni una sola bandera, ni un solo significado de celebración del ‘día de la patria’. Los hoteles tienen recreacionistas de rumba y ejercicios, pero ni una sola mención a la fecha. Le primera pregunta que se me ocurrió frente al joven que dirigía los eventos es si “él era venezolano” porque explicaría su indiferencia para no haber empezado su jornada con las notas del himno nacional. Sentí que se avergonzó un poco, reconociendo el vacío. Pero ni el hotel, ni la gerencia, nada, no hubo significado de patria. No sé si se sienten más en ‘la patria de los Char’ y Colombia es ‘otro’ territorio extranjero, pero fue notoria la ausencia de la presencia de la patria.
Pero en Cali dos días después el Supermercado tiene aún banderas a lo largo del establecimiento. Aquí están el símbolo y el reconocimiento a la madre patria. Como en redes escribí la sorpresa ante la frialdad de lugares turísticos como el Rodadero, Zuana, un señor me regañó y dijo que yo debía haberle exigido al gerente del hotel que conmemorara la celebración.
¿Será que es de esa manera? Claro que no… creo que el sentido de patria es un concepto en evolución en el mundo entero. En la reciente crisis francesa se recalcaron las diferencias entre las varias poblaciones que habitan en París y sus suburbios. Es notable que los hijos de los inmigrantes ya son franceses de nacimiento, pero no de significado. No hay sentido de pertenencia a pesar de que su nacionalidad legalmente es francesa.
Entonces, ¿los migrantes que huyen de ‘su’ patria a qué lugar pertenecen? ¿Existirán nuevas generaciones que se levantarán con el sello del desarraigo y no sentirán la necesidad de cuidar su terruño, ni reconocerán música, comida, costumbres de ningún lugar? ¿De dónde son? ¿Cuál es su patria? ¿El ‘nuevo’ mundo eliminará las fronteras en busca de abolir las diferencias en la calidad de vida? ¿Tiene sentido que un padre o abuelo le enseñen al niño sus raíces colombianas cuando vive toda su vida en el extranjero?
Empezaremos entonces a ser ciudadanos del mundo y la patria no tendrá el significado de otras épocas. ¿Sin fronteras, el ejército de un país, fiestas patrias, idioma… todo aquello que construía la nacionalidad, deja de tener sentido? Hay quienes condicionan su sentido de patria con el gobierno de turno. Si no me gustan los dirigentes ‘castigo’ a la patria, desconociéndola. Algo así como suicidarse para agredir a otros… Para muchos no hay patria porque está Petro. Respetable pero un criterio totalmente volátil. La patria no es un presidente.
Ni un alcalde. Por ello, hoy Cali celebra su aniversario y aunque para muchos no tenga significado y les importe un higo la celebración, vale la pena sentir la energía de una Cali encantadora. Un mal momento no quita la magia de la ciudad… Reconocer su brisa, su alegría, su don de gentes, su música, su comida… esa es Cali, mi Cali bella. Si lo sientes, disfrútalo. Las ciudades también contagian energía.