Gracias, amado Dios, como un buen instrumento tuyo puedo unir, sanar y armonizar, si amo y me amo de verdad.

Con el poder de tu Espíritu llevo amor donde el egoísmo hace estragos, y siembro perdón si hay odio.

Las sombras del mal se dispersan ante la luz de la fe, y el amor hace magia y cambia lágrimas por sonrisas.

Hoy elijo ser bien consciente del poder transformador de la gratitud, que nos regala alegría y esperanza.

Elijo dar gracias sin cesar por lo pequeño y lo grandioso, por mi ser y lo que me da un buen servicio.

Bendito Dios, donde vaya deseo ser alguien que une, sana, construye, alegra y da sin esperar algo.

Deseo con todo mi ser y todas mis fuerzas que todos te conozcan como realmente eres y te amen.

Dios, Que te amen y no te teman, que sepan que nunca juzgas. Amas tanto que no necesitas perdonar.

@Gonzalogallog