Todos venimos a la Escuela de la Tierra por un tiempo fugaz, con una misión y un destino.
Misión: es lo que te gusta hacer, aquello con lo que te identificas, le aporta poco a tu evolución en consciencia.
Destino: es lo que te cuesta trabajo y presenta dificultad. Aprendes lo que no sabes y evolucionas.
Si solo haces lo que te gusta, rehúyes el esfuerzo, y tu alma no avanza como debiera ser.
En otras palabras, te vas por el camino cómodo, lo que es fácil, y evades los aprendizajes arduos.
Caes en la trampa, regresas al cielo y luego volverás a la Tierra a vivir lo mismo hasta que lo apruebes.
Tú mismo eliges los aprendizajes con los ángeles, y lo más exigente lo puedes superar.
Busca ayuda y no toleres abusos o maltratos: si los sufres, cierra un ciclo, ámate y pon límites.
@gonzalogallog