Una actriz porno, una buscona extorsionista, se está dando publicidad a costa del poderoso expresidente Donald Trump. Lo obligó a declarar, bajo juramento, que sí se acostó con ella. No es un delito, pero a Trump lo vienen extorsionado sus enemigos políticos y los poco rectos fiscales de Nueva York. Hartísimo para un expresidente de 74 años y millonario verse en ese escándalo. Punto.
Trump está arriba en las encuestas para presidente y los fiscales de Nueva York quieren llevarlo a prisión. Eso le pasa por meterse con ‘zorras’. Ella amenazó con hacerlo público y pidió un millón de dólares. Recibió 150.000 por su extorsión, ella es Stormy Daniel. Tramposa y de mala uva la ‘prepago’. Trump la llamó “buscona”, sus abogados la graduaron de “zorra extorsionista”. Punto.
Un 9 de abril asesinaron a Gaitán en Bogotá en la Carrera Séptima con Avenida Jiménez, frente a El Tiempo. Su hija Gloria Gaitán y sus nietas Catalina y María Valencia Gaitán le han gritado al país: “La oligarquía creó el clima para que asesinaran a Jorge Eliécer Gaitán. Lo mataron y han evitado contarle a las juventudes y obreros quien era Gaitán, borrando de la memoria popular, el ordinario magnicidio”.
Gaitán está en mi memoria infantil porque mi papa fue gaitanista en Tuluá y ese crimen lo afectó mucho. Léase las novelas de Gustavo Álvarez Gardeazábal, quien, con genialidad, buena memoria y valentía, ha escrito la persecución a los liberales en Tuluá. Punto.
En Colombia hubo violencia. El clero católico a ratos miró para otro lado. En Tuluá hubo un ‘batallón suicida’ de diez valientes liberales que denunciaron a El Tiempo la violencia que desataba ‘El Condor’, León María Lozano, de los diez valientes mataron a ocho, se salvaron Nacho Cruz Roldán y Álvaro Cruz Lozada. Punto.
Vergüenza: los guerrillos del Eln siguen matando soldados, a jovencitos campesinos humildes.
Miércoles y soy turista en Bogotá, buen clima, todo baratísimo y estaré en el Teatro Mayor Julio Mario Santodomingo en una obra teatral y veré televisión y Netflix con mi Lulita Arango. Ustedes en Cali, imagino que irán a conocer el Dapa - Cali Country Club para saludar a nuestra vicepresidenta Francia Márquez que viaja al África con 60 acompañantes. Viajar es un súper placer cuando lo pagan ustedes los ‘pagaimpuestos’.
Este gobierno es obsesivo en viajar y viajar, por eso no han empezado a gobernar.