Centralidades peatonales que se pueden conformar a partir de la concentración de servicios y actividades en diferentes sectores de las grandes ciudades, en la medida en que sean convenientes; y a partir de centros comerciales ya existentes o nuevos, los que son peatonales y se pueden vincular con los demás edificios de uso público del lugar, y sus estacionamientos, mediante andenes apropiados.
Ciudades dentro de la ciudad, alrededor de centralidades peatonales previamente identificadas, facilitarían muchos desplazamientos cotidianos al poder hacerlos en ellas caminando o en bicicleta; y las relaciones entre sus diferentes barrios serían más claras y directas generando mayor participación de los ciudadanos en unas nuevas y pertinentes Juntas de Administración Local.
Supermanzanas que conformen vecindarios de cuatro manzanas al obligar que las dos vías de un solo sentido que las cruzan tengan que girar cuando se encuentran, una a la derecha y la otra a la izquierda, quedando así solo para el tránsito local de la supermanzana, tanto de vehículos como de bicicletas y peatones, favoreciendo el encuentro casual de sus vecinos y el intercambio de información.
Transporte multimodal e integrado que permita el rápido acceso a los trenes de cercanías, los que constituirían sus ejes principales, mediante buses articulados a cuyas estaciones se pueda llegar en pequeños buses alimentadores o en taxi, o directamente caminando o en bicicleta, por lo que deben tener espacio para guardarlas; y compartiendo un solo pasaje que va sumando distancias recorridas.
Arquitectura regenerativa que sería sostenible si parte del relieve, clima y vegetación en los que el lote se encuentra, y reutilizando lo construido en él, si lo hay, considerando el capital, mano de obra, energía y agua invertidos, y los materiales, componentes y elementos que pueden ser reutilizados y no demolerlo, y mucho menos aún ignorando su posible carácter de patrimonio cultural inmueble.
Reutilización del agua de la lluvia y la potable ya usada en los edificios y casas, para el riego de prados, jardines, huertos y vergeles, limpiar suelos y lavar carros, inodoros y orinales. En los ríos que cruzan las ciudades, hacer más arriba embalses para pequeñas hidroeléctricas y como parte de nuevos parques o zonas verdes, los que además ayudarían a evitar inundaciones más abajo.
Cubiertas fotovoltaicas generarían buena parte de la energía que se consume en las ciudades; en todos los nuevos edificios como parte de su arquitectura y en los existentes procurando no alterar negativamente su imagen mediante paneles de diferentes tamaños, proporciones y colores, incluyendo el rojo, los que podrían ser parecidos a un teja árabe para aquellas casa de tradición colonial.
Generadores eólicos dispuestos como parte del paisajismo de parques, zonas verdes y alamedas, generarían energía para el alumbrado de los espacios urbanos públicos en aquellas ciudades que cuenten con buenos vientos; igualmente se pueden instalar en muchas edificaciones como centros comerciales o industriales, y, más pequeños, en edificios de apartamentos y casas aisladas.
Vergeles en parques y zonas verdes y huertos comunales y caseros, producirían frutas y vegetales, contribuirían a la biodiversidad, mejorarían la calidad del aire y ayudarían a evitar los gases de efecto invernadero. Bien concebidos y cuidados agregarían belleza, alegría y confort a las ciudades.