El 27 y 28 de abril tuvo lugar el 26º Encuentro Nacional de Cámaras de Comercio en Pasto, espacio de construcción colectiva que permite a estas instituciones intercambiar experiencias exitosas, estrategias y programas en beneficio de la comunidad empresarial del país. Dos días además para escuchar las propuestas y proyecciones de Nariño, una gran región que hoy necesita de todo el apoyo y acompañamiento de los colombianos.
Tuvo el Consejo Nacional de Competitividad la oportunidad de compartir el Índice Multidimensional de Formalidad en Colombia que permite identificar las oportunidades que en esta materia tiene el país y sus posibles soluciones. Vale la pena destacar lo expresado por Ana Fernanda Maiguashca alrededor del impacto negativo de la informalidad en la competitividad del país y la generación de brechas de desarrollo entre regiones.
Otro de los temas tuvo que ver con la importancia para el país del conocimiento profundo que tienen las Cámaras de los territorios y sus necesidades, ello derivado de su presencia regional, capacidad para integrar los sectores público y privado y ofrecer servicios pertinentes a empresarios de todos los tamaños. La labor de las Cámaras para que existan más y mejores empresas es uno de los mecanismos más eficientes para generar movilidad social.
Sumado a lo anterior, se resaltó en el encuentro la importancia de la información derivada del Registro Mercantil, fuente para la toma de decisiones de los sectores público y privado y que además permite entre otros conocer información de todas las empresas formales del país, identificar posibles beneficiarios de programas y políticas públicas, aportar datos y estadísticas para entender el contexto económico, medir la movilidad empresarial analizando la información histórica del tamaño de las empresas y predecir el comportamiento futuro de la economía.
Esta versión del Encuentro de Cámaras fue el parlante para que sectores público y privado de Nariño le hablaran a Colombia y expusieran sus necesidades, avances, proyecciones y retos. Este departamento cuenta con una enorme riqueza cultural y natural, así como potencialidades que requieren el acompañamiento del Gobierno Nacional, aunado a los esfuerzos que las autoridades locales vienen implementando y que cuentan con el apoyo de las tres Cámaras de Comercio que tienen presencia: Pasto, Ipiales y Tumaco, las cuales reúnen 40.000 empresas, donde el sector agro es uno de los más dinámicos.
Nariño se perfila como una de las regiones que jugará un gran papel en la transición a energías limpias, con el uso de combustibles como gas licuado, gracias a la oportunidad de su masificación en mercados locales. Como lo expresó en Pasto la presidenta ejecutiva de una de las Cámaras de Comercio, el desarrollo económico solo es posible si se genera un ambiente socialmente responsable y en ese contexto las Cámaras tienen condiciones únicas que les permiten ser actores fundamentales en las regiones. Algunas de ellas son el liderazgo reflexivo, el conocimiento del entorno, la promoción de mejores prácticas y la capacidad para generar consensos.
Espacios como el vivido en Pasto que reunió cerca de 200 representantes de las Cámaras de Comercio, el Gobierno Nacional y los gobiernos locales, son la muestra de que esta es una Red que se mueve, que vibra por Colombia y por sus empresas, que se ocupa de los retos de las regiones, propone alternativas, actúa e implementa estrategias con impactos objetivos. Y es que la Red de Cámaras de Comercio comparte e impulsa el mismo objetivo de los empresarios y la sociedad: Crecimiento empresarial para generar progreso para todos.