Ya el Valle del Cauca perdió la cuenta de las veces que ha clamado a la Nación por el dragado del canal de acceso al puerto de Buenaventura. La importancia que tiene esa profundización para la competitividad del país y para el comercio internacional no parece ser argumento suficiente para que se concrete el proyecto y se le dé la celeridad que requiere.
Por esa razón la trascendencia que tiene el anuncio del Banco de Desarrollo de América Latina, CAF, sobre la inversión por US$7197 millones que realizará en el Pacífico colombiano, en la cual se incluye el dragado del canal del puerto de Buenaventura. Es un aporte considerable, que debería comprometer al Gobierno Nacional, a la Agencia Nacional de Infraestructura, ANI, encargada de su realización, y a otras entidades a respaldarlo y garantizar su ejecución.
No hay explicación del porqué siendo una obra de vital importancia para el Valle del Cauca y así mismo para Colombia y su economía, el dragado no ha sido prioritario. Hay que recordar que es una necesidad planteada varios años atrás, desde la ampliación del Canal de Panamá para permitir el paso de buques de mayor calado denominados PostPanamax, después de los cuáles llegaron unos aún más grandes, llamados NeoPanamax.
Para que esos barcos puedan arribar a Buenaventura es imprescindible llevar la profundidad del canal de 13 a 16,5 metros, lo que no se ha hecho. Es por esa causa que algunas compañías navieras decidieron eliminar de su ruta al principal puerto sobre el Pacífico Colombia y prefieren que sus embarcaciones pasen de largo hacia Ecuador y Perú, o que para sortear la situación se deban hacer trasbordos de mercancía a mar abierto, con las consecuencias que ello tiene para los costos del comercio de importaciones y exportaciones del país.
Si bien el pasado 30 de junio se adjudicó la licitación para el dragado de mantenimiento del canal, que debe iniciar en este mes de septiembre luego de años de retraso, no es claro el panorama para los trabajos de profundización. La Asociación Publico Privada, APP, aún no se concreta, se siguen realizando estudios y aún no hay fecha de inicio de las obras, lo que conllevaría a prolongar entre cuatro y cinco años la situación, restándole aún más competitividad al puerto más importante de Colombia, por el que se mueve casi la mitad de la carga marítima del comercio internacional.
Por ello se espera que con el aporte anunciado por la CAF durante la Cumbre Mundial de Bancos de Desarrollo que se realiza en Cartagena por estos días, se agilicen las gestiones y se determine de una vez cuándo se hará y a cargo de quién estará el dragado de profundización del canal de acceso del puerto de Buenaventura. El Valle del Cauca ya no resiste más incumplimientos de la Nación en cuanto a los proyectos de infraestructura prometidos y que hoy continúan en el aire.
Se requiere que el centralismo no siga atascando el desarrollo de una región que le hace un aporte importante a la economía del país, y que se honren como corresponde los compromisos hechos con el Departamento.