No deja de ser preocupante que en los seis primeros meses de 2024 apenas hayan sido erradicadas 2.278 hectáreas de cultivos ilícitos en Colombia, cifra que se queda corta ya que la meta del Gobierno Nacional para este año es eliminar 10.000 hectáreas.
Los problemas para alcanzar la cifra comprometida comenzaron en enero, mes en el que no se logró eliminar ni una sola hectárea de las 230.000 que hay sembradas con cultivos ilícitos en todo el país. Con ese nulo inicio es muy poco probable que el objetivo, aunque de por sí bajo, se logre en diciembre próximo.
En ese momento el Ministerio de Defensa dijo que ese revés en las cifras durante enero fue porque “la Policía Nacional avanzó en el entrenamiento de personal para la erradicación y se adelantó el proceso de contratación necesario de los equipos para las labores que comenzaron el 8 de febrero con 413 hectáreas eliminadas”. Sin embargo, seis meses después la labor no despega como debe ser.
Las cifras de la Policía y el Ministerio de Defensa muestran que en febrero se erradicaron 114,8 hectáreas y que marzo ha sido el mes del año en el que más se ha trabajado en esta materia, con 679,4 hectáreas eliminadas. Sin embargo, en abril solo se logró acabar con 275,1 hectáreas en todo el territorio nacional.
Ya en el quinto mes fueron 517,7 hectáreas y en junio 595,4. Según las autoridades, lo que más ha impedido que este proceso de eliminación de cultivos ilícitos se desarrolle con normalidad han sido los bloqueos de vías, las asonadas y los hostigamientos a las autoridades realizados por diferentes grupos armados ilegales.
Otro de los datos que llama la atención es que en el Cauca, uno de los departamentos del país en el que más hectáreas de coca hay sembradas, en lo corrido de este año no se ha erradicado ni un solo metro cuadrado. Por eso es urgente que así como se están destinando más uniformados para combatir a las disidencias de las Farc, al Eln y a diversos grupos criminales que operan en esta región, también se inicie con la intervención de estas zonas en las que los cultivos ilícitos abundan a la vista de todos.
Los cinco departamentos que han sido intervenidos en 2024 son Antioquia, Bolívar, Santander, Boyacá y Putumayo, este último es uno de los que más preocupa al Estado ya que allí hay varios enclaves productivos, es decir, lugares donde han persistido los cultivos y las demás etapas de producción de cocaína por más de 10 años.
Finalmente, es llamativo que en el año 2019 fueron erradicadas manualmente 94.606 hectáreas de hoja de coca y en el 2020 la cifra llegó a las 130.147, pero desde ese momento las cifras vienen bajando. Por ejemplo, en el 2021 se erradicaron 103.257; en el 2022 fueron 69.893 y el año pasado solo se alcanzaron las 20.325 hectáreas.
Es urgente que se redoblen los esfuerzos para acabar con estos cultivos ilícitos, pues entre más hectáreas sembradas existan, la estela de muerte y la violencia continuará.